SEGURO DE HOGAR III CONSEJOS PRÁCTICOS

SEGURO DE HOGAR III

Cómo intercambiar tu casa en vacaciones. El seguro te protege

Descubre las ventajas de intercambiar tu casa para ir de vacaciones. Ahorra costes y disfruta las vacaciones de una manera distinta. 

La proliferación de páginas web y apps que permiten intercambiar casas con otras personas para pasar las vacaciones demuestra que no se trata de una moda pasajera, sino de una alternativa que cuenta con muchos seguidores.

Este fenómeno nació en California en los años setenta, cuando un grupo de catedráticos decidió crear una red de universitarios que cedían sus casas durante una temporada para reducir los costes de residir en el extranjero.

Hoy, con internet, los usuarios pueden formular en tiempo real sus propuestas, colgar fotos en las plataformas digitales y filtrar todas las opciones según sus necesidades y preferencias. 

Tanto, que esta modalidad ha llegado a miles de hogares de todo el mundo, aunque, como en los sesenta, los perfiles de los interesados siguen siendo familias de clase media y alta, con buen conocimiento de idiomas y niños pequeños, o jubilados.

Los intercambios se realizan sin pagos, por lo que no hay un control por parte de Hacienda. Así que si sueñas con dar la vuelta al mundo y viajar gratis, esta es una opción para que las vacaciones te salgan mucho más económicas. Una experiencia única, viajando de manera auténtica y sin gastarse una millonada.

¿En qué consiste el intercambio de casas entre particulares?

Las nuevas tecnologías han generado nuevas experiencias de consumo colaborativo, y el uso de coches compartidos para ahorrar gastos. El intercambio de casas entre particulares es básicamente la definición de la manera tradicional de compartir, intercambiar, alquilar o prestar, a través de las redes sociales y las nuevas tecnologías.

¿Qué quiere decir esto? 

Pues que se deja atrás el contrato de alquiler vacacional, el tradicional método para adquirir una vivienda por unos días y lo que se produce es un intercambio, completamente libre, de inmuebles. Esta fórmula ya existía antes, pero ahora goza de más popularidad.

Hoy, el intercambio de casas supone un ahorro de hasta el 40% en el presupuesto total de cualquier viaje. París, Roma o Praga son algunas de las ciudades más solicitadas estos días estivales, y esta forma de alojamiento es la manera más sencilla de que muchas personas puedan costearse este tipo de destinos.

En Europa más de dos millones de personas utilizan este sistema de viaje cada año y España ya es el segundo país a nivel mundial en número de intercambios vacacionales de viviendas, sólo superado por Francia.

Dentro de los destinos más demandados por los usuarios para estas fechas destacan 

Las grandes capitales europeas por su proximidad y atractivo en el mercado del turismo cultural. París, Roma, Praga, Copenhague y Hamburgo son algunas de las ciudades que mayores solicitudes presentan para la temporada de verano. 

Precisamente, las tres que mayor número de casas tienen inscritas en esta plataforma de intercambio son París, en primer lugar, seguida de Barcelona y Madrid.

Razones para intercambiar casas en España


Ahorrar

El reclamo del ahorro es fundamental en el turismo colaborativo y en concreto, en el caso de los alojamientos. Por lo general, el intermediario (agencia o empresa de viajes), se elimina por completo y aunque algunas plataformas cobran por sus servicios de puesta en contacto de interesados, continúa siendo una alternativa más económica frente a un hotel o un alquiler tradicional.

Experiencia única y cercana

La inmersión cultural que se obtiene al residir durante las vacaciones en la casa de otra persona es mucho más auténtica que la que se puede disfrutar en un hotel. Las viviendas particulares no suelen estar en zonas turísticas (aunque las hay), sino en barrios donde es más posible conocer el día a día normal de un lugar.

Lugares con encanto

El intercambio de casas ofrece la posibilidad de vivir durante tu escapada en una casa completa de la forma y con las comodidades que prefieras, ya que actualmente hay una gran y variada oferta de viviendas para intercambiar: pisos, casas rurales o de campo, apartamentos de playa o grandes mansiones.

El intercambio de casas supone un ahorro de hasta el 40% en el presupuesto total de cualquier viaje

Sin limitaciones geográficas

Hoy el intercambio de casas se practica en todo el mundo, las principales plataformas del sector operan en multitud de países.

Las ventajas de buscar un alojamiento particular para las vacaciones son evidentes, aunque también existen ciertas limitaciones y es importante asegurarse de las condiciones en las que se practican este intercambio de viviendas, ya que no todas las opciones que se dan son iguales. 

De manera general, puedes encontrar: intercambio de una casa por otra, cesión de vivienda particular a cambio de dinero y alojamiento gratuito y solidario.

Trueque de casas entre particulares

Se trata de un intercambio en el sentido completo y estricto, y varias plataformas posibilitan este trueque que resulta legal siempre que seas el propietario de la casa que cambias o tu casero te permita este tipo de posibilidades. No hay intercambio económico por parte de los participantes, que acuerdan el cambio de viviendas por un tiempo determinado y  a título personal.

Alojamiento gratuito

Existe la posibilidad de encontrar camas o sofás en casas particulares en las que puedes dormir gratis, se trata de un movimiento totalmente solidario y cercano que busca aproximar personas y culturas a través de los viajes. Sin embargo, lo más normal es que el anfitrión deje una habitación o un espacio concreto de la misma, mientras él sigue en su casa.

Consejos para intercambiar tu casa
  • Es una forma diferente de viajar. El intercambio de casas es una fórmula diferente de viajar, pues te permite “vivir” el ambiente real de la ciudad y el país que visitas.
  • No tengas desconfianza en tus huéspedes. La principal reticencia que produce el intercambio de casas es la desconfianza ante desconocidos que residen durante un tiempo en tu casa. Sin embargo, en líneas generales, hay una valoración positiva por parte de los propietarios hacia los inquilinos, que cuidan con esmero la casa en la que residen.
  • Idóneo para familias con niños. La fórmula del intercambio de casas es especialmente idónea para familias con niños pequeños, de forma que al intercambiar la casa con una familia en similares circunstancias, dispones del equipamiento idóneo para poder vivir cómodamente con los niños.
  • Ahorro de costes. Sin duda, una gran ventaja del intercambio de casas es el importante ahorro de costes que consigues al no pagar hoteles y, si lo deseas, al poder cocinar y comer en la casa.
  • Qué empresa elegir y que casa intercambiar. Para llevar a cabo el intercambio de casas, internet ofrece numerosas alternativas. Lo importante al elegir la empresa es que te ofrezca una muy amplia oferta de casas en el mayor número posible de ciudades y países. Y a la hora de escoger la casa, tu instinto y una llamada telefónica o por Skype, pueden ayudarte a decidir.
  • Deja la casa preparada para los visitantes. Lo ideal es que cuando los visitantes lleguen a tu casa puedan ser recibidos por un familiar o un amigo vecino que les muestre la vivienda y les explique el funcionamiento del equipamiento básico (cocina, televisión). Si no puede ser, debes dejar escrito (en inglés, si son extranjeros) las instrucciones básicas de funcionamiento de dicho equipamiento.
¿Cómo actúa el seguro en el intercambio de casas?




Existen diferentes plataformas para realizar el intercambio de casas en España. Las más utilizadas son, House Trip, Home for Exchange, Intercambio Casas y Guest to Guest. 

HouseTrip cuenta con un depósito de daños para asegurarse de que el inquilino de la vivienda pague los posibles desperfectos ocasionados. Home for Exchange garantiza el intercambio formal de la vivienda a través de un contrato oficial con una serie de cláusulas y seguros.

En este caso concreto, el seguro de hogar actúa como si los inquilinos fueran amigos del propietario y estuviesen realizando una visita. Por eso es indispensable recalcar que el seguro de la casa debe estar en vigor y contar con las mismas coberturas que si vivieses todo el año en ella.

No obstante, existen otras webs como la famosa Guest to guest, que cuenta en la propia plataforma con una póliza para proteger y preparar la casa del anfitrión. Es un servicio que ofrece la propia plataforma y que te permite asegurar el intercambio de la casa.

¿Y es obligatorio contratar el seguro para operar en esta plataforma? 

No, de hecho tienes la opción de suscribir lo básico o más coberturas. Para cubrir posibles daños materiales durante un intercambio, el anfitrión puede decidir establecer una fianza en su casa, de la que se creará una autorización de cobro que acabará cuando el intercambio se termine.

También puede contratar un seguro de hogar y asistencia o cancelación de viaje, en el caso de accidente o enfermedad durante el intercambio.

¿Cómo conocer el valor catastral de una vivienda?


Este valor es fundamental para saber cuántos impuestos debemos pagar
Cada vez que se pagamos impuestos relacionados con la vivienda aparece por algún lado el valor catastral. Se trata del valor que determina los impuestos a los que vamos a tener que hacer frente por ella. Hoy te contamos en qué consiste exactamente y cómo averiguarlo fácilmente.

¿Qué es el valor catastral?

El valor catastral es una tasación administrativa fijada objetivamente para cada bien inmueble y que resulta de la aplicación de los criterios de valoración recogidos en la ponencia de valores del municipio correspondiente. 

La ponencia de valores es el documento administrativo que, siguiendo lo aprobado por la Comisión Superior de Coordinación Inmobiliaria, contiene los criterios, módulos de valoración, planeamiento urbanístico y demás elementos necesarios para asignar un valor catastral individualizado a los bienes inmuebles dentro del ámbito municipal.

Este valor se encuentra recogido en el Catastro, un registro administrativo que depende del Ministerio de Hacienda y Función Pública. Contiene la descripción de los bienes inmuebles rústicos, urbanos y de características especiales, cuya inscripción en el mismo es obligatoria y gratuita –precisamente lo que lo diferencia del Registro de la propiedad–.

Para determinar el valor catastral se consideran esencialmente las siguientes cuestiones:

La localización del inmueble, las circunstancias urbanísticas que afecten al suelo y su aptitud para la producción.

El coste de ejecución material de las construcciones, los beneficios de la contrata, los honorarios de los profesionales y los tributos que gravan la construcción, el uso, la calidad y la antigüedad edificatoria, así como el carácter histórico-artístico u otras condiciones de las edificaciones.

Los gastos de producción y beneficios de la actividad empresarial de promoción, o los factores que correspondan en los supuestos de inexistencia de la citada promoción.

Las circunstancias y valores del mercado como el valor del suelo, el valor de la construcción y los gastos de producción y los beneficios de la actividad empresarial de promoción.

En el cálculo del valor catastral no entrar los objetos que podamos tener en el interior de la vivienda ni el capital asegurado. Para proteger estos bienes hay que recurrir a un seguro de hogar. Con carácter general, además, no podrá superar el valor de mercado. 

A tal efecto, mediante orden ministerial se ha fijado un coeficiente de referencia al mercado del 0,5 en el momento de aprobación y entrada en vigor de la ponencia. En los bienes inmuebles con precio de venta limitado administrativamente, el valor catastral no podrá en ningún caso superar dicho precio.

Los valores catastrales se pueden actualizar anualmente mediante la aplicación de coeficientes aprobados por las correspondientes Leyes de Presupuestos Generales del Estado.

La utilidad del valor catastral

El valor catastral de nuestra vivienda es fundamental para saber la  cantidad de dinero que pagaremos en calidad de impuestos de distinta índole:
  • Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Si la vivienda es habitual, no habrá que pagar nada por ella dentro del IRPF, aunque sí hay que detallar toda la información al respecto. Si no es la vivienda habitual, habrá que pagar por ellas en función del valor catastral.
  • Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI). Es uno de los impuestos que más ha crecido durante la crisis, por lo que conocer el valor catastral es esencial. La base imponible de este impuesto es el propio valor catastral sobre el que pueden aplicarse reducciones si es que existen y un tipo impositivo que va desde el 0,07% al 0,15%. 
  • Con carácter general, el valor catastral de los inmuebles no podrá superar el valor de mercado
  • El impuesto municipal sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana. La conocida como plusvalía municipal calcula la base imponible con el valor catastral, pero se trata del valor catastral del suelo no de la vivienda.
  • Impuesto sobre el Patrimonio (IP). Este impuesto grava el patrimonio neto de la persona física. En cuanto a los inmuebles, se tiene en cuenta los siguientes tres valores: el valor catastral, el comprobado por la administración a efectos de otros tributos o el valor de adquisición.
  • El Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados. Grava las transmisiones de bienes inmuebles por las que se paga un precio. Para calcular este impuesto, se toma como referencia el valor del inmueble, pero no el catastral. Sin embargo, hay que incluirlo porque está relacionado con el impuesto sobre sucesiones y donaciones.
  • El Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. A diferencia del ITP, no existe un precio por la transmisión de la vivienda, ya que es una donación o sucesión. Estos dos impuestos están gestionados por las Comunidades Autónomas, que calculan su base con el valor catastral y la antigüedad del inmueble.
Inscribir un inmueble en el Catastro

La inscripción o incorporación de los bienes inmuebles al Catastro se puede realizar mediante alguno de los siguientes procedimientos, todos ellos de naturaleza tributaria:

Declaración presentada por el interesado.

Comunicación remitida al Catastro por los Notarios y Registradores de la propiedad y determinadas Administraciones Públicas.

Solicitud, en los casos legalmente establecidos, presentada por el interesado.

El valor catastral de nuestra vivienda es fundamental para saber la  cantidad de dinero que pagaremos
Además, pueden incorporarse mediante el procedimiento de subsanación de discrepancias, que se inicia de oficio, cuando se aprecie una falta de concordancia entre la descripción catastral de los inmuebles y la realidad inmobiliaria. 

También es posible inscribir los bienes inmuebles en el Catastro a través de los procedimientos de inspección, cuando se lleven a cabo actuaciones de comprobación e investigación tributaria y mediante los procedimientos de valoración catastral.

La valoración catastral colectiva

Es el procedimiento administrativo mediante el que se actualizan simultáneamente los valores catastrales de todos los bienes inmuebles urbanos y de los bienes inmuebles rústicos con construcciones de un municipio, con la finalidad de adecuarlos a los valores de mercado y concordar sus características físicas y jurídicas con la realidad.

Este método, que en la actualidad se desarrolla después de que el Ayuntamiento muestre su disposición a hacerlo, se inicia con la aprobación por el Director General del Catastro de una ponencia de valores. Previamente, eso sí, el consistorio debe emitir un informe que refleje tanto la delimitación de suelo como el propio contenido.

Conoce el valor catastral de tu vivienda

Existen varias vías para conocer el valor catastral de una vivienda. El principal requisito para obtener este tipo de documentación es que seas el propietario del inmueble. A través de la sede electrónica del Catastro podemos consultar y verificar nuestros datos. Para acceder a la información, tendremos que introducir la  referencia catastral en la casilla señalada.

Un segundo método es llamar por teléfono a al oficina del Catastro de la comunidad autónoma que corresponda. En este caso también habrá que aportar al referencia catastral y el número del DNI. 

Si ya disponemos de una copia del último pago del IBI, encontraremos el dato sobre el valor de la vivienda en este documento. En caso contrario, podemos solicitar dicho recibo por Internet o directamente en el Ayuntamiento.

Por último, tenemos la opción de personarnos nosotros mismos en el Ayuntamiento con la documentación necesaria que acredite que la vivienda está a nuestro nombre. Una vez verificado, recibiremos la información necesario la instante.

Reparación de la caldera: ¿la cubre el seguro de hogar?

Se trata de una de las averías que conllevan más incomodidades. ¿Sabes si tu póliza la contempla?
Son muchos los imprevistos que pueden suceder en una vivienda.

Por eso, cada vez son más las personas que deciden contratar un seguro de hogar, con el fin de estar cubiertos frente a caídas, roturas, robos o averías. Y entre los elementos que se encuentran en su interior, los electrodomésticos son la principal fuente de preocupación en cuanto a reparaciones se refiere.

La lavadora, el frigorífico, el horno o el lavavajillas pueden sufrir desperfectos tras una tormenta o estropearse por otros motivos. Pero, ¿están cubiertos por el seguro de hogar?, ¿qué cobertura hay que contratar para que estén asegurados?

Hoy trataremos de responder a estas y otras cuestiones relacionadas; y nos centraremos en una de las averías más incómodas de la casa: la de la caldera.

➤¿El seguro de hogar cubre los electrodomésticos?

Lo primero que hay que tener claro es que no todas las pólizas de hogar son iguales ni tienen las mismas coberturas. Pueden cubrir los daños materiales y personales que se ocasionen a terceros (responsabilidad civil), los siniestros en la estructura de la vivienda, su interior o las tres partes. 

Dicho lo cual, el contenido de una vivienda comprende tanto los muebles que se encuentran en su interior, como los equipos informáticos, las joyas, los objetos de valor y los electrodomésticos.

A la hora de contratar un seguro de hogar, es importante leer las Condiciones Particulares y Generales de la póliza, para conocer de antemano, las garantías que hemos contratado para proteger nuestro domicilio.  Los electrodomésticos son uno de los bienes que hay que tener más en cuenta.

Normalmente, estas pólizas cubren los electrodomésticos cuando sufren averías como consecuencia de cortes eléctricos o cortocircuitos, subidas de tensión o tormentas. Sin embargo, para que estén cubiertos frente a más siniestros, será necesario contratar una cobertura específica de electrodomésticos, o bien un seguro para ellos.

En todo caso y por lo general, los aparatos que cubren los seguros de hogar son el frigorífico, la lavadora, el lavavajillas y la televisión. Sin embargo, algunas aseguradoras incluyen también la cocina (de gas, eléctrica, vitrocerámica o inducción), la campana extractora de humos, el horno, el microondas, la secadora y el congelador.

Y por otro lado, algunas entidades especifican en los contratos que solamente reparan las averías de los electrodomésticos de línea blanca (vinculados a la cocina o limpieza). 

En cuanto a la forma en la que te cubre el seguro, en líneas generales, la cobertura de los electrodomésticos suele comprender la reparación del aparato o la sustitución de ese servicio por una indemnización monetaria, en el caso de que no sea posible arreglarlo.

La compañía también puede optar por dar una cantidad de dinero al asegurado si el coste de subsanar los daños es mayor al de reponer el aparato por otro nuevo. Pero para poder beneficiarse de una de las dos opciones, el aparato no podrá superar una antigüedad determinada.

Si lo hace, la indemnización no podrá ser superior al valor venal (valor del electrodoméstico en el presente).

Reparación de calderas, ¿la cubre el seguro del hogar?

Existen numerosas restricciones a la hora de contratar un seguro que cubra la reparación de la caldera en caso de avería. Por lo general, las aseguradoras suelen cubrir los daños  por agua, rotura de cristales y aparatos sanitarios, además de los gastos por deterioro, causado por fugas de agua, incendio, explosión o daños por fenómenos atmosféricos.

Las aseguradoras suelen cubrir la reparación de los aparatos o la indemnización monetaria en caso de que no pueda ser arreglado.

También, y normalmente como cobertura complementaria, contemplan la pérdida de alimentos refrigerados por la falta de suministro eléctrico. 

Si bien la compañía puede responsabilizarse de los daños ocasionados por la rotura de la caldera, lo que no garantiza es su reparación ni su sustitución. Es el cliente el que suele hacer frente a los gastos derivados de la avería de este aparato.

Seguros Multirriesgo de Hogar  

Contratar un seguro Multirriesgo te permite cubrir, en una sola póliza, tanto el contenido como el continente de la vivienda, así como la Responsabilidad Civil a Terceros, o incluso la defensa jurídica. Gracias a esto, el coste de reparar y la indemnización por pérdidas serán asumidos por la aseguradora. Los principales daños que suelen cubrir son los que han sido ocasionados por:

Incendio, humo o explosión.

Daños por agua como consecuencia de las filtraciones a través de tejados, azoteas, terrazas, etcétera. También incluye los daños ocasionados por fenómenos meteorológicos como la nieve o el granizo; los derivados de la rotura de una tubería; de dejarse un grifo abierto o de inundaciones.

Caída de un rayo.

Daños ocasionados por actos vandálicos o malintencionados.

Robo, expoliación y hurto de mobiliario, dinero en efectivo o joyas, entre otros bienes, por ejemplo, así como los daños ocasionados en la casa como consecuencia de estos delitos. También el cambio de cerraduras tras un robo o hurto y la reposición de llaves.

Atraco fuera del domicilio.
  • Daños ocasionados por la colisión de vehículos terrestres.
  • Daños eléctricos debidos a una subida de tensión e indemnización por daños en alimentos que se encontraban en frigoríficos o congeladores tras una falta o percance en el suministro.
  • Rotura de espejos, cristales, aparatos sanitarios o placas vitrocerámicas, entre otros.
  • Además de estas coberturas, el seguro incluye la reparación de electrodomésticos y, de forma concreta, la reparación de calderas, aires acondicionados y aparatos de audio y vídeo.

En abril de 2013 la Compañía de Seguros Pelayo lanzó una serie de nuevas garantías en sus pólizas de hogar. Entre ellas se encontraba la revisión de caldera, como una cobertura opcional para la vivienda del usuario y también para la segunda vivienda. El límite máximo que cubre es de cien euros para la primera, y el mismo importe para la segunda vivienda.

Pelayo garantiza la revisión anual obligatoria por Ley del calentador o caldera a gas, instalado en la vivienda asegurada, para los servicios de calefacción y/o agua caliente sanitaria. Además, la  revisión incluye la limpieza del calentador o caldera, pero no las averías, que siguen siendo el principal “escollo” al que se enfrentan los asegurados cuando se produce la rotura de algunos de estos aparatos.

Es recomendable que contrates una póliza de hogar en la que puedas asegurar todos los daños que directa o indirectamente se puedan producir como consecuencia de la rotura de la caldera.

Como cada caso es distinto, no pierdes nada por preguntar a tu aseguradora, aunque lo más probable es que cubra los daños materiales y económicos por la avería de la caldera, pero no los de repararla o sustituirla.

Seguros para calderas de gas natural

En España, casi la mitad de las casas se calientan con gas natural, frente al 33,6% que lo hace con butano, el 11,1% que utiliza gasóleo y el 2,5% que usa propano. Asegurar o no la caldera y el gas es un interrogante que se hacen muchas de las personas que apuestan por este tipo de instalación.

Al respecto, los usuarios pueden estar tranquilos, pues la ley solo establece como obligatoria la realización periódica de inspecciones, tanto de la instalación del gas como de la caldera. ¿Y el plazo para realizar estas revisiones? Pues en el caso de las calderas es conveniente que sea a cada dos años y para la instalación del gas a cada cinco.

Una caldera en mal estado puede suponer un riesgo para la vivienda, por lo que es muy importante cumplir con estos baremos que exige la ley. 

Una exhaustiva vigilancia y un adecuado mantenimiento de la caldera y de la instalación evitarán o reducirán la probabilidad de que se produjeran fugas de gas, una mala combustión de la caldera o accidentes más graves como la explosión de esta.

Fugas de agua: qué pasa con el seguro

Descubre cómo actúa tu póliza y aprende a reaccionar a tiempo ante un siniestro de este tipo. Nuestra vivienda es un espacio donde siempre merece la pena ser previsor. Y es que cualquier contratiempo que nos asalte puede llegar a convertirse en un auténtico quebradero de cabeza. 

Una de las grandes razones para contratar un seguro de hogar que nos permita resolverlo de la forma más rápida y sencilla. Por desgracia, son muchos los usuarios que no se preocupan de su póliza hasta que se ven afectado por un daño grave como el que ocasiona, por ejemplo, una fuga de agua.

Curiosamente, este tipo de percances ocurren con más asiduidad de lo que podríamos pensar. De hecho, superan los casos de robos y roturas de cristales en casa. 

Dejarse el grifo abierto, que la tubería se dañe y un largo etcétera son algunos de los detonantes habituales. Asimismo, suelen implicar reparaciones cuantiosas que, si contamos con una póliza apropiada, nos ahorraremos.

El seguro y las fugas de agua

Los problemas que pueden ocasionar las fugas, goteras o inundaciones pueden resultar muy complejos. Dicho lo cual, resulta conveniente revisar el contrato que tenemos con nuestro seguro de hogar, ya que de él dependerá la indemnización, coste de la reparación y reposición de bienes dañados a los que podremos optar.

Aquí es importante señalar que es posible que tan solo tengamos contratadas coberturas en relación al continente de la vivienda, por lo que nuestro seguro responderá ante daños en el suelo, paredes, techos y demás, pero no en el contenido, es decir, los que afecten a los enseres que se encuentren en el interior de la casa. 

En el caso de mojar a un vecino o provocarle una humedad, la aseguradora asumirá los daños a través de la responsabilidad civil frente a terceros.

Normalmente las aseguradoras cuentan con profesionales en fontanería para atender las necesidades de los clientes durante todo el año y a cualquier hora del día. 

Se trata de la llamada cobertura de daños por agua, que incluye los trabajos de albañilería y fontanería, además de las reparaciones estéticas, independientemente de si los desperfectos se han producido en la propia vivienda, en la de nuestro vecino o en la comunidad.

Para las fugas de agua, cada póliza ofrece una serie de coberturas. Las más limitadas solo atienden daños por fenómenos meteorológicos.

En todo caso, algunas pólizas de este tipo excluyen determinadas situaciones e integran otras muy específicas. Por ejemplo, pueden contemplar los daños por agua pero solo si se han producido como consecuencia de un fenómeno meteorológico o establecer condiciones a la hora de reparar las tuberías.

Otro caso similar es el de los atascos, cuya reparación varía enormemente en función de la entidad. Pueden existir, a su vez, límites monetarios o porcentuales para cada incidencia y obra. Por lo que es importante tener presente qué cubre exactamente nuestro seguro.

Exclusiones por daños de agua

Como hemos expuesto, uno de los daños que se producen con más frecuencia en una vivienda tiene que ver con el agua. Dicho esto, hay que tener en cuenta que la póliza será más cara cuento más expuesta se encuentre la vivienda. 

Una campo o de una que cuente con una instalación antigua contarán con un riesgo mayor. En todo caso, es evidente que cada seguro tendrá más o menos coberturas y posibles excepciones según la empresa. Pero de forma habitual y en materia de daños por agua, las compañías suelen excluir las siguientes situaciones:

Que el daño tenga su origen en canalizaciones públicas.

Si el piso está alquilado a un tercero y no se comunicó a la aseguradora que la vivienda estaba destinada al alquiler.

Exclusión de los daños si las tuberías están a la vista.

El daño por agua se ha producido por dejar un grifo abierto y la vivienda ha estado deshabitada durante 72 horas consecutivas.

El siniestro se ha producido por filtraciones provenientes de techos, muros o paredes originadas en viviendas colindantes.

Todos los daños derivados de la congelación del agua si la vivienda ha estado deshabitada más de 72 horas consecutivas. En este caso la aseguradora tiene que demostrar que el percance se ha producido porque el usuario no tomó las medidas adecuadas para evitar dicha situación, como vaciar los depósitos de almacenamiento.

La aseguradora no cubrirá los daños por agua si estima que no se ha hecho un seguimiento y mantenimiento adecuado de la instalación suministradora.

Cómo detectar una fuga

Igualmente, lo mejor para evitar tener que recurrir al seguro como resultado de una rotura o fuga de agua es tomar las precauciones oportunas. Para empezar, será importante conocer cómo detectar a tiempo este tipo de incidencias. 

Por fortuna, existen algunas señales que nos ayudarán a hacerlo, como los abultamientos en las paredes, humedades en la instalación hidráulica, que el inodoro desprenda agua o que el recibo del consumo de agua haya subido en exceso de forma injustificada. En todo caso, es posible prevenirlas:
  • Fugas de agua en el baño. Es uno de los problemas más usuales del hogar. Revísalas con regularidad y asegúrate de que cierran correctamente. En el caso de que alguna no lo haga, cámbiala o repárala. Un buen truco para detectar fugas radica colocar gasas secas en los grifos y, si estas se humedecen, 
  • Fugas en la cocina: es habitual que en las cocinas se den fugas de agua en las tuberías que corren por dentro de la pared. Para averiguar si existe algún problema es aconsejable acercarse al tabique y escuchar si el agua corre por ella. Si es así, contacta inmediatamente con un profesional.
  • Si percibes zonas descoloridas en las paredes de la  vivienda que carezcan de una causa justificada, obsérvalas durante algunos días. Si no desaparecen o van a más, es probable que se haya producido una fuga de agua.
Qué hacer en caso de inundación


Es posible que, a pesar de haber tomado las medidas pertinentes, nos encontremos ante un escenario complicado como es una inundación. Generalmente se puede producir por un fenómeno atmosférico adverso, como lluvias torrenciales o desbordamientos. 

Y aunque creamos que es una posibilidad muy improbable, el riesgo de que suceda en en muchas viviendas es elevado.

El riesgo por inundación en una vivienda es más elevado de lo que parece. Normalmente se da como consecuencia de fenómenos meteorológicos adversos.

En caso de verte envuelto en una situación de este tipo, lo primero que tendrás que hacer es llamar a las autoridades y abandonar la vivienda de forma inmediata, pues podría derrumbarse. Desconecta el diferencial de la luz para evitar electrocutarte.

Tras el suceso y si las autoridades te dejan entrar en la vivienda, abre todas las ventanas para que la humedad se disipe y haz fotografías de cómo ha quedado todo. 

Llama al seguro e infórmale de lo sucedido. La compañía enviará a un perito experto para que valore los daños y, posteriormente, te ofrecerá una indemnización que deberás ratificar y que te servirá para costear todos los desperfectos.

Me he caído en casa, ¿me cubre el seguro?

¿Sabías que algunas pólizas de hogar te indemnizan por los alimentos estropeados en la nevera por un fallo eléctrico?

Nuestra vivienda nos proporciona una sensación de seguridad que nada tiene que ver con las estadísticas reales. De hecho, en España se produce un accidente doméstico cada 24 segundos. Una frecuencia que supera incluso la que atañe a los siniestros de coches. Llamativo, ¿verdad?

El motivo principal es que al sentirnos relajados bajamos la guardia y surgen los despistes. Unas distracciones que pueden salirnos caras en términos de salud pero también desde un punto de vista económico. Disponer de un seguro de hogar nos ayudará en estas situaciones.

¿Cuáles son los accidentes domésticos más habituales?
Todos podemos sufrir un percance en casa, pero los colectivos más vulnerables son los mayores de 65 años, los niños y las amas de casa. Pero, ¿adivinas cuáles son los lugares que registran mayor número de incidentes? La cocina, el cuarto de baño, el salón, el dormitorio y el jardín. Es allí donde las caídas, los golpes, las quemaduras, las intoxicaciones, las hemorragias, los atragantamientos y las electrocuciones ocupan las primeras posiciones del ranking.

Los lugares que registran mayor número de incidentes son la cocina, el cuarto de baño, el salón, el dormitorio y el jardín
En todo caso, existen algunas limitaciones en lo que a daños personales y materiales (por ejemplo, que te caigas y rompas un mueble) se refiere. Razón de más para consultar tu cobertura y prestar atención a la letra pequeña cuando contrates una póliza de este tipo. En Acierto contarás con el asesoramiento objetivo de nuestros profesionales.

9 cosas que cubre el seguro de hogar y que no sabías

El seguro de hogar cubre, por ejemplo, una gotera o la rotura de un cristal. Hasta ahí perfecto pero ¿has leído, al completo, el condicionado de tu póliza? No obstante, te contamos qué coberturas “desconocidas” suelen figurar en estos contratos: 

Alimentos estropeados: si se produce un apagón eléctrico, deja de funcionar el frigorífico y los productos se estropean, algunas compañías te indemnizarán hasta un límite prefijado.

Daños eléctricos: recibirás una cuantía por los aparatos electrónicos dañados por culpa de un cortocircuito o una subida de tensión.

Daños estéticos: cuando por una avería, como por ejemplo una inundación, sea necesario hacer obra; el seguro correrá con los gastos derivados de las labores de pintura para dejar la habitación como estaba.

Fraude con tu tarjeta de crédito: si alguien, mediante coacción, utiliza tu tarjeta, un cheque a tu nombre o expedido por ti o tu libreta de ahorro, la aseguradora reembolsará la cantidad establecida con el límite máximo contratado.

Robo fuera de casa: cuando no nos encontremos en nuestra vivienda y nos quiten, con violencia o intimidación, cualquiera de los bienes que tengamos incluidos en el contenido de la póliza. Además si por el forcejeo nuestra ropa se mancha o se rompe, algunas compañías lo cubren también.

Rotura de vitrocerámicas, loza sanitaria, cristales y mármoles: la aseguradora repondrá cualquiera de estas piezas por otras idénticas o similares si estuvieran descatalogadas.

Mobiliario de cocina: si se produce una explosión o se quema el aceite y se estropean los muebles o la campana.

Ayuda con las tareas de bricolaje: algunas entidades ofrecen este servicio para auxiliarte a la hora de montar muebles, cambiar bisagras o instalar enchufes, por ejemplo. Los gastos de desplazamiento del profesional y de las primeras horas de mano de obra suelen estar incluidos con un límite máximo de visitas. El asegurado solo deberá pagar el importe de los materiales y las horas adicionales.

Responsabilidad civil: muchas veces las mascotas y los niños son impredecibles. Con tu seguro de hogar ya no tendrás que preocuparte de cosas como que tu perro cause algún desperfecto, muerda a alguna persona, etcétera; o de que tu hijo rompa el escaparate de una tienda o el cristal de algún vecino.

Responsabilidad civil vs responsabilidad civil familiar en el seguro de hogar
La responsabilidad civil es una cobertura incluida en prácticamente todos los seguros. La compañía asume la indemnización de los daños provocados por parte del asegurado, de manera accidental, a un tercero. Es muy recomendable para evitar disgustos ante cualquier imprevisto. Por lo tanto, si eres el propietario de la vivienda y tu hijo o un amigo tira algo por la ventana y lesiona a un vecino, serás el responsable legal.

¿Qué ocurre si estoy de alquiler? En ese caso es el arrendatario –el inquilino– será quien se haga cargo de los daños causados. De ahí la importancia de contratar un seguro de hogar, incluso si no eres el propietario de la vivienda. Por otra parte, la responsabilidad civil familiar es una garantía que puede incluir el seguro de hogar. Su particularidad es que cubre al titular del seguro pero también a las personas que conviven en el mismo domicilio y dependen económicamente de él: hijos, cónyuge, y empleadas del hogar.

7 consejos para prevenir caídas y accidentes en casa

Como hemos visto anteriormente, existen determinados perfiles que suelen tener más accidentes en el hogar. Pero, si seguimos unas sencillas recomendaciones, evitaremos que se lastimen:
  1. Suelos resbaladizos: algunas baldosas son muy peligrosas, por eso resulta recomendable cambiarlas por otras rugosas o colocar alfombras que minimicen su riesgo. Evita que pisen los suelos cuando estén recién fregados.
  2. Escaleras seguras: si no tiene pasamanos o barandilla en las escaleras, instala uno. También ayudará colocar bandas antideslizantes en cada uno de los peldaños.
  3. Cuidado con los calefactores: las estufas de gas, las eléctricas y los braseros son los responsables de muchas explosiones por escapes de gas. Toma las precauciones necesarias y nunca te los dejes encendidos mientras duermes.
  4. Vigila los elementos de la cocina: los mangos de las sartenes colócalas siempre hacia adentro, corta los alimentos en una tabla, vigila la vitrocerámica, busca una manopla para sacar la comida del horno, etcétera.
  5. Sé prudente en el baño: es más accesible el plato de ducha que la bañera. Coloca dentro una alfombra antideslizante y otra fuera para evitar resbalones. No te duches con el agua demasiado caliente porque puede provocarte mareos y caídas. Los aparatos eléctricos y el agua no son buenas combinaciones. Aléjalos.
  6. Iluminación: enciende la luz de la habitación antes de entrar y cambia las bombillas que no funcionen para evitar tropezar con algún obstáculo.
  7. Calzado: no camines sin zapatos o zapatillas. Puede haber cristales en el suelo o cualquier otro elemento que te haga sufrir una lesión.
Seguro para empleadas del hogar


Es obligatorio que estén dadas de alta en la Seguridad Social. Si eres una empleada del hogar o quieres contratar a una seguro que te estás preguntando si debes darte (o darla) de alta. 

Hoy te contamos todo lo que debes saber sobre el régimen laboral de estas trabajadoras. Lo primero que debes saber es, no obstante que, aunque la mayor parte de este colectivo son mujeres, la ley habla en general de “empleados de hogar”.

Se trata de trabajadores que tienen una relación laboral especial ya que la labor se realiza en el propio domicilio del empleador y existe un vínculo en el que la confianza personal es muy importante. Pero vayamos con más detalles.

Qué es un empleado del hogar

Una empleada de hogar puede ser contratada por un cabeza de familia o por el titular del hogar familiar, para hacer las tareas domésticas, el cuidado del hogar o de los miembros de la familia, pero también puede hacer otras funciones.

Si quien contrata a la trabajadora es una empresa, una ETT o  se realiza un contrato mercantil, no será una empleada del hogar, sino que se establece otro tipo de relación. 

Estamos hablando, por ejemplo, de un trabajador de la limpieza o de un autónomo que presta ese tipo de servicios. Tampoco son empleados del hogar los cuidadores profesionales contratados según la Ley de Dependencia.

Dicho lo cual, ¿cómo se contrata? ¿Quién debe cotizar? ¿A qué prestaciones de la Seguridad Social tendrá derecho? Concretamente, el Real Decreto-ley 29/2012, de 28 de diciembre, de mejora de gestión y protección social en el Sistema Especial para Empleados de Hogar.

El contrato de las empleadas de hogar

El contrato deberá realizarse necesariamente por escrito si va a durar al menos cuatro semanas. Si no se hace por escrito se considerará que es indefinido y a jornada completa. 

En él deberán constar: el salario, la jornada laboral (con su distribución) y especificar si va a pernoctar en el domicilio (empleado interno).

Sea cual sea el número de horas que trabaje una empleada de hogar, tiene que estar dada de alta en la Seguridad Social.

Circunstancias específicas de las empleadas de hogar

Con las últimas reformas legales las empleadas de hogar han visto crecer sus derechos, pero aún así se mantienen algunas diferencias con el resto de los trabajadores. Estas son las particularidades más importantes en la actualidad:

Sea cual sea el número de horas que trabaje una empleada de hogar, tiene que estar dada de alta en la Seguridad Social. No se puede trabajar sin el alta. El contrato ha de precisarse por escrito, siempre que los servicios sean por un tiempo superior a cuatro semanas.

El empleador es responsable de que la empleada doméstica esté dada de alta y pagar las cotizaciones que correspondan a las horas que trabaje.  Aunque solo trabaje una hora a la semana, la trabajadora tiene que estar de alta y cotizando la parte proporcional a esa hora trabajada. En el caso de que el trabajo fuera en varias casas, cada uno de los empleadores son responsables.

Como acto para facilitar los trámites, las empleadas de hogar que presten servicios en un domicilio menos de sesenta horas podrán tramitar ellas mismas su alta y cotización, siempre que exista un acuerdo entre ellas y el empleador, que se puede reflejar en el contrato. 

En aquellos casos en los que se trabaje más de sesenta horas mensuales para el mismo empleador, sigue vigente la normativa que obliga a que sea el empleador el que realice todos los trámites.

Si se trabaja en varios hogares familiares distintos, cada una de esas relaciones laborales se trata por separado, hay que comunicar tantas altas como hogares.

En cuanto al salario, la empleada de hogar tiene que recibir como mínimo el Salario Mínimo Interprofesional (SMI)  por una jornada de trabajo completa, pero se puede pactar una mejora. 

El pago se tiene que hacer en dinero, en metálico o talón. Se puede acordar que parte del salario se pague en especie (manutención o alojamiento Además se tiene derecho a dos pagas extra (junio y diciembre).

Si la empleada de hogar trabaja únicamente por horas de manera puntual, su sueldo estará fijado según el SMI para trabajadores eventuales, temporeros y  empleados del hogar.

El alta en la Seguridad Social

Los trámites para formalizar el alta, han de realizarse en la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS). Aquí, se deben cumplimentar diferentes impresos oficiales y se indicarán todas las circunstancias: datos personales de ambos (empleada y empleador), el número de horas de trabajo, el salario, etc.

En caso de variaciones de datos o la solicitud de baja, debe presentarse en un plazo de tres días naturales siguientes al del cese en el trabajo o de aquel en que la variación se produzca. 

De cualquier modo, será el personal de la TGSS quién calculará a cuánto asciende la cotización cada mes  (en función de las horas trabajadas). 

Las bases de cotización se calculan en función de la retribución que reciba la empleada doméstica (esta tabla está disponible en el Ministerio de Empleo y Seguridad Social).

Una vez que se hayan calculado las cuotas a pagar, se pasará el cargo a la cuenta bancaria indicada a final de cada mes. Hemos de recordar que la responsabilidad por el incumplimiento de la obligación de cotizar corresponderá al propio empleado y, subsidiariamente, al empleador, salvo que estos demuestren que entregaron al trabajador las cantidades para el pago de su cotización a la Seguridad Social.

La nota negativa de las condiciones de las empleadas de hogar es que no cobran prestación por desempleo.

Las bajas por enfermedad

Sin duda, el mayor avance conseguido en los últimos tiempos es que si una empleada doméstica enferma o tiene un accidente laboral y le dan una baja médica, podrá cobrar la prestación por incapacidad temporal a partir del cuarto día de baja. 

Entre el cuarto y el octavo día (ambos inclusive) será el empleador el que pagará la prestación. A partir del noveno día y los sucesivos corren a cargo de la Seguridad Social, aunque se debe hacer la solicitud. Anteriormente, la prestación no comenzaba hasta pasados 29 días de baja.

La nota negativa de las condiciones de las empleadas de hogar es que no cobran prestación por desempleo.

Seguros del Hogar

Asimismo, es esencial la persona que trabaje en nuestra casa esté asegurada ante un posible accidente doméstico. Cada compañía aseguradora tiene unos requisitos. 

Podríamos incluir a las trabajadoras domésticas en nuestro seguro, pero únicamente con la cobertura de responsabilidad civil familiar. Se trata de que la póliza cubra cualquier daño ocasionado en el domicilio y, de no tenerla, será el asegurado quien deberá hacerse cargo del coste.

En realidad no existe un seguro para empleada doméstica, pero lo que sí se puede hacer es contratar uno de accidentes o de salud para evitar algún problema más importante que un desperfecto. En cualquier circunstancia, consulta tu seguro del hogar y comprueba qué posibilidades te ofrece respecto a tu empleada doméstica.

¿Buscas trucos para engañar al seguro de hogar? ¡Error!

Recabamos algunos de los fraudes frecuentes y trucos para engañar al seguro de hogar y timar a la compañía. Si bien se trata de un problema cuyos orígenes se remontan décadas atrás, durante los últimos años hemos visto cómo los fraudes a las compañías de seguros han aumentado notablemente. 

Un repunte que ha afectado especialmente a los timos en las pólizas de coche pero también a las de hogar. En concreto y según los datos del informe elaborado por la UNESPA (Unión Española de Aseguradora) solo en 2015 se detectaron más de 306 mil reclamaciones falsas, y desde 2008 las tentativas se han incrementado hasta en un 145%.  

Una realidad que los expertos relacionan con la crisis económica y con el aumento de los llamados fraudes oportunistas, más fáciles de detectar. ¿El motivo? Que quienes los practican no suelen ser profesionales sino, sencillamente, personas que han visto la “oportunidad” de aprovecharse de la situación. 

Una mala idea que puede acabar teniendo consecuencias legales devastadoras, por no hablar de la rescisión de la cobertura y otros inconvenientes más obvios directamente relacionados con nuestra compañía.

Fraudes frecuentes a los seguros de hogar


Dicho lo cual, existen una serie de fraudes que los clientes llevan a cabo con mayor frecuencia. Uno de los más habituales consiste en atribuir una avería mecánica de un electrodoméstico como la lavadora o el frigorífico –y cuya reparación o cambio supone un gasto notable– a un repunte de tensión eléctrico. 

En estos casos el daño existe, pero no es fruto de un cambio en la red de energía, sino de un mal uso, del desgaste del propio aparato, o similares.  

Aquí tienes que saber que detectarlos resulta relativamente fácil si la entidad envía a un perito experto. Lo mismo ocurre con las reclamaciones desproporcionadas en las que, de nuevo, existe un perjuicio real. 

De hecho, en estos casos el daño puede ser consecuencia de un hecho que sí cubre el seguro. También resulta sencillos de descubrir, incluso sin la actuación de un especialista. Otro timo parecido tiene que ver con abultar la factura de la reparación, aunque basta con comparar los precios del mercado.

Con ocultaciones de daños preexistentes nos estamos refiriendo a, por ejemplo, que el cliente omita intencionadamente que un electrodoméstico ha empezado a fallar.

Las denuncias falsas por robo y las ocultaciones de daños preexistentes son otros de los habituales. Respecto a los primeros, aumentaron considerablemente (hasta un 40%) en 2013. 

Fue entonces cuando la policía hizo público que se habían incrementado las que tenían que ver con el robo de efectos informáticos (ordenadores, routers, tabletas, móviles y similares, que también puede incluir el seguro multirriesgo). En tales casos es básico estudiar cómo ha sido forzada la cerradura de la casa.

Con ocultaciones de daños preexistentes nos estamos refiriendo a, por ejemplo, que el cliente omita intencionadamente que un electrodoméstico ha empezado a fallar, que la casa que ha asegurado tiene ciertos desperfectos, etcétera. 

Este tipo de delitos, en todo caso, suelen darse con mayor asiduidad en las pólizas de salud, aunque las empresas suelen cubrirse las espaldas con cuestionarios previos.

Un fraude llamativo al seguro de hogar

Dejando a un lado los mencionados, encontramos un caso ciertamente llamativo. Fue el que llevó a cabo un sujeto que alquilaba su vivienda en plataformas tipo Air bnb. 

Para evitar que alguno de sus inquilinos acabara convirtiéndose en un okupa, cambiaba la cerradura regularmente y daba parte al seguro, afirmando que se había producido un robo. Y todo por ahorrarse lo que le costaban esas nuevas llaves.

Lo que delata al defraudador

Aunque establecer un perfil de “defraudador tipo” resulta complicado, ICEA (una entidad especializada en estadísticas y estudios del sector asegurador en nuestro país) existen algunos rasgos comunes que pueden servir para detectar estas estafas. Por ejemplo, lo habitual es que sea el propio asegurado el que reclame directamente al seguro -en lugar de un mediador o un tercero implicado-.

Asimismo, es frecuente que la reclamación tenga lugar unos días antes de que venza la póliza de hogar o poco después de contratarla, que no se aporten comprobantes originales, y que se presente documentación excesiva –que la entidad no haya solicitado-. Los historiales con una elevada siniestralidad y las informaciones vagas e imprecisas en la narración de los hechos son también sospechosos; así como la similitud en los apellidos de los implicados, que residan muy cerca los unos de los otros, etcétera.

Qué hacen las compañías

Por otra parte, debes saber que la mayoría de compañías disponen de protocolos de actuación para prevenir y detectar a tiempo este tipo de estafas. Es el caso de AXA Assistance, que cuenta, incluso, con una Unidad de Daños Eléctricos para gestionar los timos relacionados con esta garantía, una de las más susceptibles al fraude.  

También tienen equipos que se encargan de llevar a cabo un seguimiento de los gastos derivados de daños producidos en cristales, y calderas; y de comprobar que las facturas que pasan los asegurados se corresponden con los precios del mercado. La labor de investigación, en todo caso, resulta clave.

Estafar al seguro de hogar, una mala idea

Lo primero que tienes que saber es que, si tu compañía te pilla intentando colársela, automáticamente rescindirá vuestro contrato. 

Y no solo eso, sino que te incluirá en una suerte de “lista negra” específica que comparte con otras entidades del sector. ¿El resultado? Que a partir de ese momento te resultará más complicado encontrar a alguien que quiera asegurarte. Y si lo consigues, te saldrá muy caro.  

Por otra parte y desde un punto de vista legal, estaríamos hablando de un delito de estafa. Nuestro Código Penal se refiere a él en el artículo 248, donde refleja también que será castigado con penas de entre seis meses y tres años de prisión. Por no hablar de las multas, que pueden llegar a ser muy cuantiosas.

Se trata de un delito de estafa, penado por el Código Penal con entre sis meses y tres años de prisión
Cabe comentar también que, si bien las aseguradoras distinguen entre los fraudes oportunistas –en los que el siniestro ha ocurrido pero que ha aprovechado el cliente para reclamar un daño inexistente–, planeados –premeditados– y aquellos en los que se exageran los hechos –para cobrar más dinero–; todos ellos pueden acabar conllevando repercusiones notables. 

No obstante, estas dependerán de la cantidad estafada, de la gravedad de las acciones, y parámetros parecidos.

Un ejemplo de lo que puede pasarte

Llegados a este punto no podemos dejar de citar un caso que tuvo lugar a principios de este mismo año. Fue entonces cuando la Audiencia de Valladolid condenó con un año de cárcel a un individuo que fingió un robo en su hogar con el objetivo de cobrar una indemnización. 

El hombre aseguraba que un ladrón había forzado la puerta de su casa y se había llevado el bolso de su mujer.  

En su interior, supuestamente, había 700 euros en efectivo, un mechero de plata, un móvil, un portátil y dos tarjetas de crédito que los delincuentes habrían utilizado para llevar a cabo una compra por valor de 1.600 euros. 

Tras enviar a los peritos especialistas, la entidad se percató de la falsedad de los hechos y rechazó el siniestro. Curiosamente, el asegurado interpuso una demanda de juicio verbal que, sin duda, acabó costándole cara.

En concreto las autoridades estimaron que había simulado el delito y falseado un documento mercantil, y le condenaron a un año de prisión y a pagar una multa de más de  4.000 euros. En definitiva un claro ejemplo de las consecuencias que pueden acabar teniendo este tipo de delitos.

¿Sabías que tu seguro puede cubrirte si se te rompe el móvil?

En función de las coberturas que tengas contratadas, algunas pólizas de hogar contemplan la rotura del teléfono y sus averías.

Los teléfonos móviles cuentan con capacidad para guardar cientos de archivos de todo tipo (imágenes, vídeos, audios, etc). 

Esta información personal, recuerdos otros datos, dependen, aunque a veces lo olvidemos, del funcionamiento correcto de nuestro dispositivo, que como cualquier otro aparato puede sufrir una avería. 

Si carecemos de copias de seguridad de los ficheros y no hay almacenados en ningún otro lugar, podríamos acabar perdiendo información relevante.

Más aún si tenemos en cuenta que el teléfono móvil es, para la mayoría de las personas, una herramienta indispensable y que cualquier incidencia que pueda sufrir puede conllevar consecuencias desagradables. Razón de más para tomar precauciones. 

Una de las más obvias es incluir una cobertura específica para esta clase de percances en el seguro de hogar. Hoy recabamos algunos consejos de seguridad básica y contamos cómo contemplar las aseguradoras de estos siniestros.

Asegura la recuperación de datos de tu móvil

Existen varias formas de recuperar los datos almacenados en su dispositivo móvil : ocultar los archivos que desean proteger, bloquear las aplicaciones para restringir el acceso, utilizar el modo invitado, hacer copias de seguridad en el nube o poner las contraseñas en las aplicaciones. Pero   la mejor manera de asegurar todos los datos que lo elimina nuestro smartphone es hacer una copia de seguridad del mismo.

Esto significa guardar los datos para poder recuperarlos incluso en caso de perder el dispositivo. Para ello existen varias aplicaciones que realizan copias de seguridad en Google Play, con las que transferir datos y hacer una copia de seguridad en nuestro ordenador.

¿El teléfono inteligente y está estropeado?

Para recuperar los datos de su teléfono inteligente puede contar con la ayuda de su ordenador. Antes de comenzar deberemos activar la depuración USB en la configuración del dispositivo Android para asegurar de que el PC reconocerá el smartphone.

Si aún con el móvil conectado al ordenador no encontrar los datos que buscábamos, existen una serie de programas generalistas muy útiles para resolver estos problemas : Remo Recover, Wondershare MobileGo Android y Recuva. Estas son las últimas aplicaciones para PC muy fáciles de usar:
  • Wondershare MobileGo Android: en primer lugar hay que iniciar el programa y conectar el teléfono inteligente a través de un cable de USB. Cuando reconozca el dispositivo, tendrás que seleccionar el lugar de almacenamiento de los datos y después de los archivos que quieren transferir.
  • Recuva : es un programa algo más complejo pero mucho más potente, ya que es capaz de recuperar archivos, imágenes y otros datos eliminados por accidente. Para conseguirlo, debe iniciar el programa, seleccione el tipo de archivo que desea recuperar, seleccione la carpeta para buscar los archivos y los datos que desea recortar el archivo de la imagen y hacer clic en "iniciar el proceso de recuperación".
Recuperar datos con la pantalla rota

¿Tu teléfono inteligente ha caído con la boca abajo y ahora es imposible de controlar? Este es uno de los casos más comunes: el dispositivo está encendido, pero la pantalla está en negro y no responde cuando la tocamos. Sin embargo, puedes recuperar los datos y archivos. 

Para los terminales móviles que soportan el protocolo USB OTG, además, es posible manejarla a través del ratón del ordenador.

Para ello, tan solo hay que conectar el ratón y teclado al dispositivo móvil mediante un cable conector USB OTG. Otra opción es tomar el control de su teléfono inteligente desde el PC. Para ello existen aplicaciones en la Play Store que te puedes tomar el control de tu smartphone. TeamViewer Host es una de ellas, pero necesitas tener la pantalla activada y desbloquear tu terminal para acceder a ella.

¿Qué seguros cubren la rotura del móvil?

Los smartphones se han convertido en una de nuestras inversiones en el mundo más valioso. Sin embargo, cuando nuestro término sufre otro tipo de percance, además de preocuparnos por los daños que sufrido, los pensamos en los seguros que tiene contratados y en qué tienen cobertura. 

Sabemos que existen especificaciones para móviles y tabletas con una cobertura básica para los daños, que protegen una protección de calidad.

Hay seguros que da cobertura para móviles y tablets y para estos dispositivos ofrece un servicio técnico oficial de su marca por caídas, golpes y derrame de líquidos. Además de una indemnización por su irreparabilidad, esto es, el valor venal del móvil en el momento del accidente. 

Este dato es similar cuando nos referimos al valor venal de un automóvil por accidente o avería. Se calcula sobre la factura, con el IVA incluido y descontando el 5% del total y el accidente se produce durante el primer año; Y un 20% si se produce un largo del segundo año.

Además de esta cobertura básica, puede completarla con los accesorios : el móvil de la sustitución para cubrir el tiempo en que el usuario se queda sin el terminal por avería accidental, e indemnización por robo y atraco. En este caso, se produce una recompensa por el valor venal del móvil en el momento del robo. Las condiciones son las mismas que en caso de accidente.

De igual forma, este seguro Casero para móviles y tabletas proporciona una cobertura de hasta 2.000 euros si se efectúan llamadas al extranjero o un número 902 durante las 72 horas posteriores en las que se debe dar de baja el teléfono. Y si necesitas duplicar la tarjeta SIM, la mención también está encargada.

¿Los seguros de hogar cubren la rotura de pantalla?

La mayoría de los seguros de hogar tienen protección y asistencia en caso de avería de electrodomésticos de línea blanca y mecánicas, eléctricas y electrónicas. Además, la cobertura por robo suele obligar a la aseguradora a indemnizar al asegurado, en caso de que los ladrones roben su teléfono inteligente, en su domicilio.

Sin embargo, la mayoría de ellos no incluyen la reparación de aparatos de telefonía e informática , en caso de rotura accidental, dentro de la cobertura básica, sino que es necesario contratar una cobertura extra o adicionales , para este tipo de casos. 

Suele ser necesario contratar el paquete de seguro de hogar más completo, con todos los extras, para lo que incluir cobertura de nuestros teléfonos móviles. En definitiva, los seguros de hogar básicos no cubren la rotura de pantalla ni del propio dispositivo.

¿La responsabilidad civil cubre la rotura de un móvil?

La responsabilidad civil de los seguros de hogar cubre los daños personales y materiales a los terceros que han provocado en el ámbito de nuestra vida doméstica.

 Por ejemplo, que tengamos una visita y por una acción involuntaria dañemos el móvil de una de las personas que no visita. Al ser un daño material provocado por una acción involuntaria en el ámbito de nuestro hogar, el seguro se hace carga de los daños en el teléfono. 

Es importante recordar que solo cubre los daños a los terceros, pero que si la rotura del dispositivo es alguien de la casa, no lo hace.

Seguros de hogar para viviendas de lujo

Como se diferencian los seguros de hogar en las casas de lujo. Aunque no es obligatorio, el seguro de hogar es una opción que cada vez eligen más personas para proteger a sus viviendas y a sus seres queridos frente a algún tipo de eventualidad que pueda suceder. 

Y el caso de las casas de lujo no es diferente. En esta guía te contamos todo lo referente a las pólizas de hogar de lujo y que las diferencia de otros seguros más comunes. 

¿Qué es una vivienda de lujo?

Todos tenemos una imagen de casa de lujo en nuestra cabeza, pero no todas son iguales, ya que dentro de este concepto se engloban muchos tipos de viviendas. 

La característica común de todas ellas suele ser el elevado precio, pero pueden ser desde castillos palaciegos hasta casas modernas con todo tipo de comodidades (domóticas, espacios inteligentes, etc.).

Una de las cosas que más encarecen una vivienda es la inclusión de tecnología: reconocimiento dactilar, grifos inteligentes con agua carbonatada, etc. 

Además, el tamaño obviamente, es otro factor sumamente importante. También es realmente significativo el garaje, ya que lo normal es que este tipo de clientes cuenten con un importante parque automovilístico que suele necesitar de grandes medidas de seguridad y unas dimensiones lo suficientemente grandes.

La localización de la vivienda en cuestión también es muy importante, ya que dependiendo de la zona, serán más caras o más baratas. Zonas rurales frente a urbanas, determinados barrios, si las urbanizaciones tienen seguridad propia, etc. son elementos a tener en cuenta. 

En cuanto a los seguros de hogar, las compañías suelen meter dentro de este grupo aquellas que superan el millón de euros sumando el valor de la edificación y los elementos internos como el mobiliario, es decir, el continente y el contenido. 

En realidad, en lo que a las pólizas se refiere, el tamaño da igual, solo importa el valor económico de esta.

Seguros de hogar específicos para casas de lujo

Las pólizas de hogar para casas de lujo tienen en común muchas coberturas con las pólizas estándar, ahora bien, lo normal es que añadan otros supuestos que los seguros de hogar no incluyen. 

Algunas de estas coberturas específicas son las destinadas a proteger objetos de alto valor (como obras de arte), hurto por parte del servicio doméstico, protección de materiales de construcción de alto valor, materiales personalizados, etc.

Calcular correctamente el valor de la casa, para no caer en el infraseguro o el sobreseguro

El problema está en calcular correctamente el valor de la casa, para no caer en el infraseguro o el sobreseguro ya que, si no calculas bien el valor de reposición (sobre todo para bienes de especial valor) puedes encontrarte con estar pagando más de lo que debemos (sobreseguro) o menos (infraseguro). 

En este último caso, además, en el caso de que haya algún siniestro, te tocará pagar una parte de los costes, que puede ser una cantidad muy elevada.

Aspectos que influyen en el precio de la póliza
  • Ubicación de la casa: Cómo ya hemos indicado anteriormente, la ubicación del hogar influye notoriamente en su precio de compra. Por tanto, también interviene en el precio del seguro, ya que el capital invertido es fundamental a la hora de calcular la póliza. Además, según donde se encuentre la vivienda, tendrá más o menos posibilidades de sufrir robos.
  • Características de la casa: Según como sea la casa habrá más o menos probabilidades de sufrir un accidente. Por ejemplo, si tiene piscina con trampolín, es más factible que alguien se caiga o algo similar.
  • Años de construcción: La antigüedad es es importante ya que, a más vieja, más probabilidades de que se produzcan averías y más cara será la prima.
  • Materiales: A más calidad de los materiales, más cara será la póliza, ya que su reparación conlleva unos costes más altos.
  • Tipo de uso: Aunque sea obvio, no hay que dejar de indicarlo. Que la casa sea un domicilio habitual, vaya a ser alquilada, vaya a ser destinada a poner un comercio, etc. es fundamental a la hora de establecer el precio del seguro.
¿Qué es el continente y el contenido?

El continente de una vivienda es todo aquello que forma parte de la estructura del edificio y son elementos fijos. Las paredes, los muros, los cimientos, las columnas, las instalaciones fijas (telefónica, eléctrica, agua, etc.). 

Además, los elementos de decoración que también sean inamovibles son continente, como el parquet, la pintura o la escayola. Es importante tener en cuenta que las rehabilitaciones y reformas también son continente (continente = vivienda en momento de entrega + reformas posteriores).

El contenido por su parte está formado por aquellos elementos que están dentro de la vivienda, no forman parte de la estructura y pertenezcan al asegurado o a algún tercero que viva habitualmente en el edificio. 

Algunos ejemplos podrían ser los muebles, la ropa, las joyas, productos tecnológicos, etc. Es importante que si tienes objetos de valor especial (como las obras de arte) lo especifiques a la hora de contratar una póliza, ya que si no lo haces no recibirás ninguna indemnización en caso de siniestro. 

Además del contenido y el continente, los seguros de hogar suelen incluir la responsabilidad civil de terceros, que cubre los daños que se ocasionen a un tercero por parte del asegurado o las personas que vivan con él. Un ejemplo sería la rotura de la ventana de un vecino provocada por un balonazo propinado por nuestro hijo.

Qué pasa si tu inquilino te destroza la casa

Descubre todos los pasos que deberías seguir para reclamar los daños que te ha causado
Si bien alquilar un piso puede constituir una buena opción para obtener unos ingresos extra, también puede dar lugar a algunos problemas. 

Nos estamos refiriendo a aquellos relacionados con los impagos de alquileres y otras situaciones a priori difíciles de solucionar (aunque existen seguros específicos). Porque, ¿qué sucede si mi inquilino me ha destrozado la casa y no basta con la fianza? Hoy te explicamos todos los pasos que deberías para poder demandarle por daños en tu vivienda alquilada.

Pasos que debes seguir si tu inquilino te destroza la casa

En primer lugar, debes saber que, tanto para reclamar por daños menores o por actos vandálicos, deberán cumplirse una serie de requisitos. Para empezar, es imprescindible probar que el daño ha sido causado por el inquilino. 

Una buena manera de hacerlo es incluir una cláusula en el contrato de alquiler y fotografías que indiquen en qué estado se encuentra el inmueble y su contenido.

Es recomendable que al finalizar el contrato, casero y arrendado firméis un documento que confirme la entrega de las llaves y la fianza.

Asimismo, es recomendable que, al finalizar el mismo, casero y arrendado firméis un documento que confirme la entrega de las llaves y la fianza. Si optas por no devolverla, indica las razones, captura los daños y pídele a tu inquilino que firme para ahorrarte problemas. Si se niega, necesitarás lo que se conoce como un testigo imparcial.

En todo caso, es posible que la devolución de las llaves tenga lugar antes de que puedas comprobar en qué condiciones ha quedado la vivienda. En todo caso, siempre tendrás la opción de reclamar por la vía judicial.

La reclamación judicial
  • Se lleva a cabo cuando la fianza es insuficiente y el piso alquilado está destrozado. En este caso, no queda más remedio que demandar al inquilino por todos estos daños. 
  • Lo primero que se debe hacer es obtener las pruebas pertinentes para justificar la reclamación. Para cosecharlas es recomendable:
  • Acudir al acto de entrega de llaves con uno o dos testigos, si es posible imparciales, como el portero del bloque o un vecino de la comunidad.
  • Tomar fotografías del estado del piso.
  • Valorar los daños mediante un perito.
  • Si se poseen los medios económicos para ello, llamar a un notario que acuda a la vivienda en el momento de la entrega de llaves para que conste legalmente el estado de la casa.

Evitar que todo este proceso comentado se dilate demasiado en el tiempo.

Esta necesidad de no alargar demasiado la reclamación tiene que ver con el “nexo causal”. Es decir, que se puedan relacionar los daños ocurridos en la vivienda con la presencia del inquilino en este periodo. Normalmente, para que sea efectiva, no debe superar los dos meses desde la finalización del contrato, de lo contrario no se entenderá de forma tan fácil que el daño lo ha producido el inquilino saliente.

La reclamación debe ser rápida para que se puedan relacionar los daños ocurridos en la vivienda con la presencia del inquilino en este periodo
Si se cumplen todos estos requisitos será más fácil salir ganando, aunque cabe tener en cuenta que, en ocasiones, obtener todas las pruebas anteriormente mencionadas y realizar los trámites legales implica un coste que deberías sopesar con detenimiento, sobre todo si crees que tu antiguo inquilino puede declararse insolvente.

Y es que aunque se le condene a pagar, el juez no podrá obligarle a hacerlo si este no tiene dinero o bienes embargables. Por lo tanto, siempre deberemos tener presente que una sentencia favorable no implicará necesariamente el pago de los daños.

Algunos apuntes legales:

En referencia a la fianza, siempre es un lance complicado y que suscita choques entre ambas partes. El inquilino tendrá la impresión de que lo justo es que se la devuelvan, y el casero quizá no sepa en qué situaciones determinadas le corresponde quedársela de forma legítima.

Por eso, la Ley de Arrendamientos urbanos expone una serie de disquisiciones. En su artículo 36 específica cómo se puede gestionar esta situación. Para empezar, a la hora de cerrar el contrato, será obligatorio que el usuario abone como fianza la cantidad equivalente a una mensualidad del alquiler. Dicha normativa determina también que en los primeros tres años de contrato la fianza no podrá modificarse por que, en caso de prórroga del arrendamiento, se podrá solicitar un incremento.

Cuando se termine el contrato y se abone la fianza, el casero tendrá un mes de plazo para abonarla desde la entrega de las llaves. No obstante, podrá no hacerlo si su inquilino no pagó alguna de las cuotas o mensualidades durante el alquiler, si constata algún desperfecto en los muebles o electrodomésticos y si la vivienda está sucia al ser devuelta. En este último caso el dinero de la fianza se usará para limpiar la vivienda a fondo.

Consejos de utilidad para el casero
  • Si tu inquilino te ha jugado una mala pasada o quieres alquilar tu piso con todas las garantías, te comentamos una serie de puntos que siempre deberías tener presentes para que no tengas problemas y ofrezcas el mejor servicio a tu usuario.  
  • Todos los acuerdos, así como notificaciones y las reclamaciones del alquiler, han de constar siempre por escrito.
  • Nunca se han de incluir en el contrato cláusulas abusivas o directamente ilegales, ya que, como es lógico, terminan por perjudicar a quien las establece.
  • A la hora de entregar la vivienda, conviene asegurarse de que todos sus enseres y equipamiento están en el mejor estado posible.
  • Constata por todos los medios posibles la solvencia económica del inquilino, pues, en caso de impago el proceso de desahucio podría prolongarse.
  • No hay que perder de vista que el inquilino tiene derecho a permanecer en la vivienda tres años y que se puede marchar a los seis meses si así lo desea.
  • Nunca deberemos solicitar la fianza si no estamos seguros de que la persona vaya a alquilarnos el piso. Y es que podríamos vernos obligados a devolverla por partida doble si finalmente no se lleva a cabo el contrato.
  • Una vez entregada la vivienda, el casero jamás puede entrar en ella sin permiso del inquilino. Si se transgrede esta norma se está violando una norma constitucional y penal.
  • Todas las urgencias y reparaciones que se presenten se deben subsanar con la máxima diligencia posible. Esto redunda en una buena relación con el inquilino.
  • Como hemos explicado anteriormente, a la hora de finalizar el contrato con el inquilino se debe asegurar por escrito el estado en el que se ha encontrado el piso, para poder reclamar por los daños y desperfectos que hayan podido ocasionarse.
  • Es recomendable acudir a un abogado para la redacción de cláusulas y conceptos jurídicos que puedan ser complicados, ya que, en muchas ocasiones, pueden resultar confusos.
Fugas de gas: qué pasa con el seguro




¿Cómo actúa nuestra póliza si se da esta circunstancia y cómo podemos prevenirla?

Nuestra casa es sin duda uno de nuestros bienes más preciados; tanto, que protegerla con un seguro de hogar será fundamental. Un tipo de póliza que responderá ante problemas diversos y que nos ayudará en situaciones tan complicadas como una fuga de agua o de gas. Sin embargo y para estar cubiertos ante estas últimas incidencias, deberemos contar con una cobertura específica.

¿La razón? Que casi cualquier problema de este tipo suele conllevar un desembolso económico importante. Por no hablar de las incomodidades que puede causar la avería de la caldera, o de los peligros que implica la manipulación de estos sistemas. 

En todo caso, tendrás que revisar cómo responde la compañía ante estos supuestos, así como los protocolos de actuación con los que cuenta. De hecho, las respuestas ante una explosión causada por gas pueden ser muy distintas de una entidad a otra.

Gestión del seguro ante una explosión de gas
En el caso de que una vivienda sufra una explosión derivada de una fuga de gas, la aseguradora será quien determine la responsabilidad –que podrá ser del propietario, el inquilino o la empresa instaladora– y decida cómo actuar.

Responsabilidad civil del propietario de la vivienda:

La fuga que dio lugar al suceso se ha producido por culpa del propietario, y además ha provocado daños materiales y personales. En este caso, el seguro del hogar actúa desde la cobertura de responsabilidad civil del dueño de la vivienda. Sin embargo, no queda cubierto su daño patrimonial.

Responsabilidad civil del inquilino:

En este supuesto es el inquilino quien se revela responsable del incidente. Este deberá tener contratado un seguro del hogar para inquilinos que le cubra la responsabilidad civil frente al propietario.

En caso de que se produzca una explosión de gas, la aseguradora determinará la responsabilidad antes de decidir cómo actuar.

Responsabilidad civil de la empresa instaladora:

Si se determina que la responsabilidad civil corresponde a la compañía instaladora del sistema de gas, deberá actuar el seguro de la empresa, y tendrá que contar con cobertura de trabajos en el exterior además de otra de post-trabajos para que sea efectiva.

De todas formas, cabe advertir que este tipo de siniestros se dan en muy pocas ocasiones. Ya que resulta improbable que pequeñas fugas de gas o la mala combustión de una caldera de una vivienda terminen en una explosión, aunque no es imposible. No obstante, una simple fuga puede llegar a afectar de forma grave la salud de los habitantes de la casa.

Estos efectos no deseados se pueden evitar si tenemos presente que nuestro sistema de gas necesita de un seguimiento, una buena prevención y una ejecución realizada con las herramientas adecuadas para detectarlo.

En nuestras casas usamos hidrocarburos en forma de gas. Es el caso del butano y el propano. Cuando se produce un escape, este puede haber tenido lugar desde su lugar de almacenamiento o red de abastecimiento, como son las tuberías o calderas. El gran peligro que entraña una fuga es que puede provocar la intoxicación por monóxido de carbono.

La inhalación de gas conlleva consecuencias para la salud prácticamente inmediatas. Con una concentración mínima en el ambiente puede llegar a desencadenar un resultado fatal.

Es necesario tener presente que la inhalación de estos gases conlleva consecuencias para la salud prácticamente inmediatas, y que una concentración de apenas el 6% en el ambiente pueden desencadenar un resultado fatal. 

Por lo que es muy recomendable  cumplir una serie de requisitos para prevenir los escapes de gas.

¿Cómo puedo prevenir una fuga?

Con algunos sencillos hábitos podemos ahorrarnos cualquier sorpresa desagradable en relación a nuestro sistema de gas. Un consejo básico es que siempre que salgas de casa cierres la llave de paso de gas general o la propia de cada aparato.

Asimismo, haz que un profesional acreditado revise el estado de la caldera. Algunos seguros del hogar incluyen esta opción. Hay que remarcar que por ley, se exige que, como mínimo, cada cinco años se debe cumplimentar dicha revisión, pero lo mejor es realizarla de forma anual.

Es recomendable hacer una limpieza de toda la instalación de forma regular, además de mantener y situar puntos que tengan la mejor de las ventilaciones posible. También es muy conveniente solicitar a un especialista que instale una alarma de monóxido de carbono, ya que este gas es incoloro e inodoro, por lo que sería muy complicado detectar un escape.

¿Qué hacer en caso de fuga?

Pese a todo, siempre es posible que se pueda dar una fuga de gas en nuestro domicilio. Y ante esta coyuntura, es esencial conocer una serie de nociones de seguridad con las que poder evitar cualquier intoxicación o posible explosión.
  1. En cuanto percibas el olor del gas o te haya avisado tu detector, cierra de forma inmediata las llaves de paso y la general. Y es que puede haberse producido un escape o que se haya apagado la llama de la caldera.
  2. Es esencial mantener la calma. Resulta imprescindible estar tranquilo y actuar de forma racional, sin alarmar al resto ni entrar en estado de pánico.
  3. Desaloja la vivienda y a todos sus ocupantes con el fin de evitar cualquier intoxicación de la forma más ágil posible.  
  4. Abre todas las ventanas para ventilar toda la estancia. Es importante tener presente que si se trata de gas butano este es más pesado que el aire y se acumula en las partes bajas de la casa. Si es gas natural, pesa menos, por lo que se concentra en las zonas altas de la vivienda.
  5. Es muy importante que no se enciendan bajo ningún concepto aparatos o interruptores, ya que podrían provocar una chispa. Y esta, por mínima que sea, puede desencadenar una explosión.
  6. Además, el teléfono móvil nunca se debe utilizar en el interior de la habitación donde se haya constatado el escape.
  7. Ponte en contacto lo más rápido posible con el servicio técnico para que revisen el problema. En el caso de que la fuga haya sido considerable, es conveniente llamar a los bomberos para que realicen una inspección pormenorizada.
Cuatro fenómenos atmosféricos que cubre tu seguro de hogar

Por regla general, suelen hacerse cargo de los desperfectos por lluvia, granizo, nieve y viento, aunque dependerá de las coberturas que tengas contratadas.

Los fenómenos atmosféricos pueden ser los responsables de ocasionar daños en tu vivienda. La Agencia Estatal de Meteorología, junto con los diferentes organismos gubernamentales, es la responsable de acreditar la magnitud e intensidad de dichos fenómenos.

Asimismo, tienen la consideración de fenómenos atmosféricos:
  • La  lluvia –siempre que se registre una precipitación por encima de los 40 litros por metro cuadrado
  • El viento –cuando sople a velocidad superior a 80 kilómetros por hora
  • El pedrisco
  • Granizo o nieve –independientemente de su intensidad.
Los daños ocasionados por inundaciones extraordinarias, terremotos, maremotos, erupciones volcánicas, tempestad ciclónica atípica y caída de cuerpos siderales y aerolitos, en los que se ven inmersos las Fuerzas Armadas y los Cuerpos de Seguridad del Estado, están cubiertos por el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS).

Este consorcio se trata de una entidad pública que depende del Ministerio de Economía y que trabaja en colaboración con las compañías aseguradoras, ofreciendo cobertura en situaciones de riesgos extraordinarios. Pero para poder beneficiarse de las indemnizaciones que proporciona el Consorcio, el interesado debe tener contratado previamente un seguro de hogar.

Los fenómenos atmosféricos y el seguro de hogar

Asegurar una vivienda no es obligatorio, aunque sí muy recomendable. Sin embargo, pese a contar con un seguro de hogar que cubra responsabilidad civil, continente, contenido, o solo alguna de las partes del contrato, es posible encontrarse con incógnitas sobre la aplicación de su cobertura. 

Los seguros de hogar suelen incluir coberturas para incendios, robos y daños causados por fenómenos atmosféricos como la lluvia, la nieve, el granizo, el viento e incluso los terremotos.

Al contratar una póliza, para proteger tu hogar, ya sea una vivienda unifamiliar o colectiva, puedes cubrir los riesgos que afecten tanto al contenido –desperfectos en muebles y otras propiedades–, como al continente –daños en puertas, antenas o cristales–. Por lo general, los seguros de hogar cubren los daños causados por:
  1. Agua de lluvia, siempre que la intensidad de la precipitación supere un límite, que suele situarse en los 40 litros por metro cuadrado y hora.
  2. Granizo o pedrisco, que suelen estar cubiertos independientemente de su intensidad.
  3. Nieve, con independencia de la intensidad de la precipitación mínima, el seguro cubre los desperfectos ocasionados por la acumulación y el desprendimiento de la nieve en los tejados o por el exceso de peso que generan.
  4. Viento, siempre que la velocidad sea superior a los 96 kilómetros por hora, pero en ocasiones y, dependiendo de la compañía, se acepta un límite inferior; los 80 o incluso los 70 kilómetros por hora.
¿Cómo lo comprueban las aseguradoras? 

La compañía solicitará el correspondiente certificado a la Agencia Estatal de Meteorología o a los medidores oficiales pertenecientes a los Ministerios, Comunidades Autónomas o Entidades Provinciales más cercanas.

Cobertura de los daños causados por fenómenos atmosféricos

El grado de cobertura que cada compañía aseguradora proporciona en los casos de daños causados por fenómenos metereológicos, depende del tipo de póliza y de las condiciones establecidas previamente en el contrato con la entidad. 

Y aunque los riesgos relacionados con estos fenómenos son siempre los mismos, las condiciones para que los daños sean cubiertos, pueden diferir entre compañías.

Lluvia

Las coberturas de daños por agua son opcionales y según la compañía, puede que los daños por filtraciones y goteras debido a la lluvia no están cubiertas. Pero normalmente, casi todos los seguros de hogar cubren los daños por lluvia, siempre que la intensidad de la precipitación supere los límites acordados en la póliza, es decir, los 40 litros por metro cuadrado y hora. Si las precipitaciones superasen esa intensidad, el asegurado sería indemnizado.

Inundación por lluvia 

Si se excediesen los 40 litros por metro cuadrado y hora, provocando la rotura o avería de canales artificiales o acequias en la superficie,  el seguro de hogar se haría responsable de los desperfectos ocasionados.

Extracción de lodo 

Si la lluvia genera lodo en la vivienda y necesitas extraerlo, el seguro se puede hacer cargo de los gastos, siempre y cuando la causa se encuentre recogida como un riesgo en la póliza de hogar.

Limitaciones de la cobertura por lluvia

Además del límite de los 40 litros por metro cuadrado y hora, las goteras y filtraciones son daños que pueden no estar cubiertos por la compañía. 

También se excluyen los casos en los que se hayan producido daños como consecuencia de no haber cerrado las puertas o ventanas por las que se filtró el agua.

De igual forma, si el cierre de estas es defectuoso la compañía también puede negarse a pagar. Por último, los daños ocasionados por defectos de  construcción o de mantenimiento en el edificio u hogar tampoco se encuentran contemplados.
  • Pedrisco: los daños causados por la piedra o granizo grueso están cubiertos por el seguro de hogar independientemente de su intensidad. Además, esta cobertura suele extenderse y aplicarse a los daños materiales que pueda ocasionar el agua de lluvia u otro fenómeno, sin límite de intensidad, durante las 24 horas posteriores.
  • Las goteras, filtraciones y daños ocasionados por dejar las puertas y ventanas abiertas pueden no estar cubiertos por la aseguradora
  • Nieve: los desperfectos derivados de la nieve también están recogidos en el seguro de hogar, y al contrario que la lluvia, no es necesario fijar una intensidad de precipitación mínima para que lo cubra el seguro. La compañía se encarga de los daños ocasionados por el desprendimiento de nieve acumulada en superficies y del exceso de peso.
  • Viento: con los siniestros ocasionados por el viento ocurre lo mismo que con la lluvia, es necesario que se alcance una intensidad prefijada por la aseguradora, para que la póliza que protege la vivienda, se haga cargo de los desperfectos. La intensidad mínima para que se active se sitúa en los 75 kilómetros por hora, aunque en algunos casos puede ser necesario que la velocidad del viento alcance los 80, 90 e incluso 96 kilómetros por hora.
  • Rayos: si como consecuencia de una descarga eléctrica violenta, producida por un rayo, la vivienda asegurada sufre daños, el seguro de hogar se hará cargo de ellos hasta los límites indicados en las condiciones particulares de la póliza contratada. Razón de más para revisarla al dedillo antes de decantarte por una u otra.
¿En qué situaciones el seguro de hogar no me cubre los daños por fenómenos atmosféricos?
  • Daños por instalaciones en mal estado. Es responsabilidad del asegurado mantener las instalaciones en perfecto estado. Por ello, si la vivienda sufre un daño como consecuencia de un fenómeno atmosférico, por el mal estado del inmueble, el seguro no lo cubrirá. De igual forma no se hará cargo de los daños eléctricos que sufran las bombillas, lámparas, halógenos, fluorescentes o similares.
  • Accidentes por el consumo de tabaco. Los daños causados por cigarrillos mal apagados y que sufran los objetos que caigan accidentalmente al fuego, así como los ocurridos por contacto directo o indirecto con una fuente de calor, no estarán cubiertos en el seguro de hogar.
  • Roturas. Solo se cubre la rotura accidental de cristales, loza sanitaria y mármol. Si se produce la de cualquier otro bien, no se incluirá salvo que tengamos contratada la cobertura de Todo Riesgo Accidental.
  • Daños por nieve, agua, arena o polvo si hemos dejado las puertas o ventanas abiertas. Tampoco los daños ocasionados en el mobiliario del jardín, aún siendo por fenómenos atmosféricos no estarán cubiertos.
  • Y por último, los daños por viento o lluvia de intensidad moderada no estarán contemplados, ya que para que sean considerados “de riesgo” deberán superar una intensidad y velocidad mínima, y tendrá que corroborarlos un informe meteorológico.
Los desastres naturales, ¿qué seguro me protege de ellos?

Existen otros riesgos que van más allá de la lluvia, el pedrisco o la nieve y que debido a su carácter extraordinario están cubiertos por el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) en lugar de por las pólizas convencionales que protegen las viviendas. 

Sin embargo, esto no quiere decir que el seguro de hogar no haga nada frente a sucesos extraordinarios.

La normativa actual establece que en todo seguro de hogar se incluya una prima, a favor del Consorcio de Compensación de Seguros, para que sea éste el que proteja a los asegurados frente a riesgos extraordinarios. 

Cubren grandes pérdidas materiales y personales, como consecuencia de los riesgos catastróficos que se producen y que quedan excluídos de las pólizas básicas.

Los daños a los que hace frente el CCS son los ocasionados por terremotos, maremotos, erupciones volcánicas, caídas de cuerpos siderales, tempestades ciclónicas atípicas e inundaciones extraordinarias.

El Consorcio de Compensación de Seguros abonará los daños producidos por estas causa, con la condición de tener contratado con cualquier aseguradora, un seguro de hogar y estar al corriente de pago de la prima del seguro de la póliza. 

Además, el CCS establecerá un periodo de carencia de siete días desde que el seguro de hogar entrase en vigor.

Las cerraduras inteligentes. ¿Sabías que abaratan el seguro de hogar?

Conoce los mejores modelos y por qué estos elementos de seguridad abaratan el precio de tu seguro de hogar.

Que las nuevas tecnologías han afectado a numerosas facetas de nuestra vida es una realidad evidente que han evidenciado desde la popularización de los llamados wearables, hasta el nacimiento de plataformas de intercambio de casas en vacaciones. 

Una digitalización que también se ha plasmado en la seguridad de nuestras casas y en la implantación de las conocidas como cerraduras inteligentes.

Se trata de dispositivos mucho más seguros y complicados de abrir para los ladrones al uso, que ahora deben contar con conocimientos informáticos para poder desactivarlas. 

¿Qué son las cerraduras inteligentes?


Como todas las cerraduras, su función es la de garantizar que la puerta solo pueda ser abierta por las personas autorizadas. No obstante, son muchas las que pueden controlarse a distancia (para abrir o cerrar la puerta, controlar quién entra y sale), que integran cámaras, que prescinden de todo soporte físico, etcétera.

Las hay que cuentan incluso con sistemas de reconocimiento de huellas dactilares

Las hay que cuentan incluso con sistemas de reconocimiento de huellas dactilares y que permiten entrar en casa al detectar que llevamos el móvil en el bolsillo, con altavoces y micrófonos integrados –a través de los cuales hablarle al mensajero que tenemos esperando en la puerta o al posible caco– y similares. 

En definitiva un enorme salto evolutivo frente a las cerraduras con llave de toda la vida que ofrece múltiples comodidades y no pocas ventajas.

¿Qué características debe tener la cerradura inteligente?

En primer lugar, existen dos categorías de cerraduras inteligentes: con teclado o sin él. Aquellas que cuentan con él brindan la opción de asignar códigos a diferentes personas, acabando con el problema de las copias y las pérdidas de llave. 

Sin embargo, los teclados ocupan mucho más espacio en la puerta, y existe la posibilidad, aunque remota, de que un ladrón pueda adivinar tu código para entrar en tu casa.

Otra característica importante es que lleve incorporada una alarma que suene en el momento en que se intente forzar la cerradura. 

Esto es indispensable para asegurar tu casa y evitar los robos. Asimismo existe una gran variedad de estilos y acabados, pero sea cuál sea la decisión final lo más importante es que no sea una cerradura ni de segunda mano ni muy baratas pues podrían resultar fraudulentas.

Ventajas de las cerraduras inteligentes
  1. En primer lugar las cerraduras inteligentes son realmente cómodas. A través de una simple aplicación del móvil, podrás ponerte en contacto con la cerradura y abrir la puerta cuando hayas llegado a casa.
  2. En segundo lugar son fáciles de usar. Todos los miembros de la familia podrán abrir la puerta sin ningún tipo de conocimiento de informática. 
  3. En tercer lugar son muy fáciles de instalar, ya que en pocos minutos  tú mismo podrás instalar tu propia cerradura inteligente. Eso sí, para conseguir unos buenos objetivos, siempre tendrás que seguir al pie de la letra las instrucciones del fabricante.
  4. Es tan sencillo, que las personas mayores incluso las podrán abrir, siempre y cuando tengan un móvil con la aplicación instalada y el código para abrir la cerradura.
  5. Permiten monitorizar quién entra y sale
  6. Cuentan con sistemas de comunicación y vigilancia integrados.
  7. Acaban con el problema de las copias de las llaves y la pérdida.
  8. Las cerraduras inteligentes no solo se pueden abrir con un smartphone, sino que dependiendo del modelo que instales, podrás utilizar incluso las llaves tradicionales. Asimismo, existe la posibilidad de utilizar la huella dactilar como otra alternativa para abrir tu domicilio. Este tipo de cerraduras aún son más cómodas, ya que incluso cuando no tenemos el móvil, podemos abrir la puerta. 
  9. Contar con una repercute positivamente en el precio de tu seguro de hogar.
Cerraduras inteligentes, ¿cómo influyen en mi póliza?

Este dispositivo para acceder a la vivienda es en sí mismo un mecanismo antirrobo y de vigilancia. Además, tras los últimos avances, hemos podido ver cómo las cerraduras se han vuelto mucho más seguras que las primeras que salieron al mercado, que eran más vulnerables y fáciles de manipular.

Las famosas radiografías o llaves maestras no servirán para entrar en un domicilio, sin el permiso de sus residentes. El control de la cerradura mediante un móvil o la huella digital dificultará la labor de robo de los “cacos”.

No obstante, aunque las cerraduras inteligentes son mucho más seguras que las tradicionales, no lo son tampoco al 100%. Esto se debe a que los hackers siguen investigando para ver las vulnerabilidades de este tipo de cerraduras. No obstante la mayoría integra sistemas de seguridad y antirrobo adicionales o posee una gama de productos de este tipo compatibles con ella.

Por otra parte, si contamos con este tipo de herramientas de seguridad en nuestra vivienda nuestro seguro de hogar lo tendrá en cuenta y abaratará nuestra póliza. La razón es que las compañías aseguradoras estiman que se trata de un hogar más protegido y, por lo tanto, que se reduce el riesgo de sufrir un robo. Algo que plasman en la prima.

¿Cuáles son las mejores cerraduras inteligentes?

En el mercado encontramos una gran variedad de cerraduras inteligentes que no deja de crecer. Ahora que conoces qué son y cómo funcionan las cerraduras inteligentes, es importante que descubras cuáles son las mejores.
  • TESA ENTR: Es una de las más vendidas, principalmente porque se trata de una de las más seguras. Es un modelo que puede instalarse de manera sencilla, a la vez que permite conectar a varios dispositivos. Esto hace que todos los miembros del hogar puedan abrir y cerrar la puerta sin problemas.
  • LOCKITRON: Es un modelo realmente muy interesante ya que se programa de manera sencilla. Te permite controlar la cerradura desde la propia app del móvil, cerrar y abrir la puerta a distancia, etcétera.
  • AUGUST SMART LOCK: Es una de las cerraduras más completas, sobre todo si estás buscando una que te permita saber quién entra o sale. Además de poder abrir y cerrar la puerta con el móvil, también crea un registro con estos datos. De esta manera podrás saber si alguien ha llegado a casa a una hora poco habitual, controlar las entradas de tus hijos, la niñera o la mujer de la limpieza (en caso de tenerlas), y más.
  • KWIKSET KEVO: Es una cerradura inteligente que no tiene desperdicio, porque se conecta al smartphone mediante Bluetooth y te permite abrir y cerrar cerraduras a distancia. Permite además enviar autorizaciones remotas a invitados para que puedan entrar en tu casa si no tienen llave.
¿Qué hacer cuando vendemos una casa asegurada?


Si tenemos asegurada nuestra vivienda o estamos pensando en contratar una póliza de hogar, hay que saber cómo actuar en el caso de que vendamos nuestra casa asegurada y lo que sucede si nos encontramos en esta situación. 

El seguro de hogar no es obligatorio en España (como los de coche por ejemplo), pero sí es una opción que cada vez son más los que la eligen para cubrir las espaldas de sus seres queridos y proteger su casa.

El seguro de hogar no es obligatorio en España, pero sí es una opción que cada vez son más los que la eligen para cubrir las espaldas de sus seres queridos y proteger su casa.

Si nuestra vivienda no tiene hipoteca pero sí seguro de hogar

Hay que tener en cuenta que muchas entidades bancarias piden como condición indispensable para otorgar una hipoteca que el cliente suscriba un seguro de hogar. 

Pero en el caso de que, aun sin hipoteca, tengas una póliza de este tipo, y vendas tu casa, tienes dos opciones: cancelar el contrato de seguro o traspasarlo al nuevo propietario, es decir, al comprador.

Lo primero que hay que hacer, sobre todo si vamos a cancelar el seguro, es tener claras las Condiciones Particulares de la póliza ya que, aunque suelan tener vigencia anual y se prorroguen automáticamente pueden darse otro tipo de cláusulas. 

Además, la ley establece que se tiene que comunicar a la compañía la baja con un mes de antelación como mínimo si estás pensando en no renovar tu póliza. 

En el caso de que quieras cancelar tu póliza por venta, no hay un plazo límite. Pero te recomendamos que si tienes alguna duda de cómo proceder, lo mejor es consultar directamente a la aseguradora.

¿Y si nuestra vivienda está hipotecada?

En este caso, tu vivienda tendrá seguro de hogar con total seguridad ya que, como hemos indicado antes, los bancos suelen pedir que tengas una póliza de estas para poder obtener el préstamo. 

Por otra parte, la Ley de Contrato de Seguro establece que “en caso de transmisión del objeto asegurado” (en este caso, la vivienda), “el adquirente se subroga en el momento de la enajenación en los derechos y obligaciones que correspondían en el contrato de seguro al anterior titular”, es decir: que al vender la vivienda, lo haces también con el seguro, que se transmite al comprador. 

No ocurre así cuando se trata de pólizas nominativas para riesgos no obligatorios, afirma la ley, si en las condiciones generales existe pacto en contrario. Ante este escenario, el nuevo propietario tiene varias opciones respecto al seguro:
  1. Puede no querer cambiar de compañía. En este caso solo se cambiaría el nombre del tomador, aunque lo normal es que la prima también pueda cambiar. La compañía tiene dos semanas para dar su visto bueno al cambio de titular y si resuelve no conceder dicho cambio, deberá devolver la prima no consumida. Sobre las obligaciones de la aseguradora y del tomador del seguro, en caso de que no se acepte el cambio de titularidad, la citada Ley en su Título II (Seguros para daños), Sección primera (Disposiciones generales), Artículo 35, dispone: “El asegurador podrá rescindir el contrato dentro de los quince días siguientes a aquel en que tenga conocimiento de la transmisión verificada. Ejercitado su derecho y notificado por escrito al adquirente, el asegurador queda obligado durante el plazo de un mes, a partir de la notificación. El asegurador deberá restituir la parte de prima que corresponda a períodos de seguro, por los que, como consecuencia de la rescisión, no haya soportado el riesgo." 
  2. Puede cancelar el seguro, si quiere contratar otro seguro con otra compañía. Respecto a los plazos y obligaciones, la Ley (en el mismo Artículo 35) establece que: El adquirente de cosa asegurada también puede rescindir el contrato si lo comunica por escrito al asegurador en el plazo de quince días, contados desde que conoció la existencia del contrato. Esto no supone recuperar la prima. Al contrario: “En este caso, el asegurador adquiere el derecho a la prima correspondiente al período que hubiera comenzado a correr cuando se produce la rescisión.” En conclusión: un seguro cancelado anticipadamente supone que la prima no se devuelve. Por ley, la compañía sólo está obligada a devolver el importe de la prima equivalente al período restante de contrato en los casos de petición de cambio de titular, si ésta es rechazada.
¿Por qué contratar un seguro de hogar?

Los accidentes o eventualidades que pueden surgir en una vivienda son mucho más comunes de lo que pensamos. Un simple descuido como dejarse un grifo abierto puede provocar costosos desperfectos. 

Además, hay otros aspectos que no podemos controlar, ya que no dependen de nosotros, como puede ser el robo o los desperfectos provocados por vandalismo o por fenómenos meteorológicos. Es por todos estos motivos por los que muchas personas deciden contratar una póliza de hogar.

En el caso de que ocurra alguna de estas situaciones, tener una póliza que nos respalde hará que no tengamos que correr con los gastos, al menos no con la totalidad de ellos. Además, la mayoría de seguros incluye la responsabilidad civil como cobertura básica. 

Esto quiere decir que, si se da el caso en el que ocasionamos daños a un tercero (por ejemplo se cae una maceta desde nuestro piso al balcón inferior rompiendo las baldosas del suelo) los costes por reparación o indemnización correrán a cargo de la aseguradora.

También podemos incluir la defensa jurídica, que resulta de gran utilidad frente a determinadas situaciones como la reclamación de daños a terceros, reclamaciones laborales, etc. Hay que tener en cuenta además el estatus que tenemos con respecto a la casa donde vivimos. 

Si somos los propietarios nos convendrá un tipo de seguro, si estamos alquilados, otro. Si vivimos en una comunidad o en una vivienda individual, si es un piso o un chalet, si vivimos solos o con familia, etc. son factores que también influyen a la hora de elegir una póliza y en la prima que deberemos pagar.

Cuestiones imprescindibles sobre el Certificado de Eficiencia Energética

Descubre en qué casos es obligatorio, cómo obtenerlo, quién se encarga de realizarlo y otros detalles
Si estás pensando en alquilar o vender una vivienda es muy probable que hayas escuchado hablar del Certificado de Eficiencia Energética. 

Este documento de reciente implantación –entró en vigor en junio de 2013– cogió por sorpresa a muchos propietarios que no sabían de su existencia. En esta guía te desvelamos todo lo que debes saber sobre él, desde para que sirve hasta cómo obtenerlo, entre otros.

¿Qué es el Certificado de Eficiencia Energética?

El Certificado de Eficiencia Energética es un documento oficial requerido por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo que incluye la información relativa a las características energéticas de un inmueble. 

Este justificante debe realizarlo un técnico competente y en él se señala el consumo anual estimado que necesita un edificio en condiciones normales de utilización. Se tienen en cuenta los gastos relativos al agua caliente, la iluminación, la ventilación, la calefacción y la refrigeración.

Un edificio puede ser calificado como A, B, C, D, E, F o G, siendo la A la marca de más eficiencia y la G la de menos. Este documento debe ser emitido por un técnico competente, esto es, alguien con titulación académica y profesional que se encuentre habilitado para hacer proyectos y dirigir obras de edificación y de instalaciones térmicas.  

El certificado sirve para informar tanto al propietario como al posible comprador de lo eficiente que es energéticamente un edificio. Este puede ser un elemento diferenciador en la venta entre inmuebles similares.

¿Es obligatorio?

El artículo 2 del Real Decreto 235/2013 estipula que este certificado es obligatorio para todos aquellos edificios de nueva construcción, para los edificios o partes de edificios que se vendan o alquilen a un nuevo arrendatario o para los edificios públicos que tengan una superficie superior a los 250 metros cuadrados y que estén habitualmente frecuentados por el público. 

Por lo tanto, si queremos alquilar un piso, este deberá contar obligatoriamente con el Certificado de Eficiencia Energética.

La ausencia de este documento puede conllevar penalizaciones económicas que van desde los 300 hasta los 6.000 euros, según el tipo de infracción. 

El certificado tiene una validez máxima de diez años. Pasada esa fecha habrá que volver a expedir el documento. El propietario puede elegir libremente el técnico, así que tiene libertad para comparar entre los diferentes presupuestos y ofertas del mercado.

No están obligados a disponer de este certificado los edificios religiosos, las construcciones provisionales  –que tengan un plazo previsto de utilización de menos de dos años–, las construcciones destinadas a la industria o a la agricultura, los edificios con menos de 50 metros cuadrados, y los que vayan a ser adquiridos para reformas importantes o para demoliciones.

No es obligatorio para aquellas viviendas que se utilicen menos de cuatro meses al año y tengan previsto un consumo anual de energía menor al 25% 

Un punto reseñable es que tampoco es obligatorio para aquellas viviendas que se utilicen menos de cuatro meses al año y tienen previsto un consumo anual de energía menor al 25%  de lo que se utilizaría en todo un año. 

Por lo tanto, los pisos de la playa que solo se alquilan en verano o las casas rurales que solamente son utilizadas unos meses al año no tienen la obligación de tener el certificado. No obstante, el propietario se hace responsable de que ese inmueble no va a sobrepasar ese límite de energía.  

¿Cómo se consigue la certificación energética?

Para obtener la certificación energética, en primer lugar deberemos ponernos en contacto con un profesional cualificado. Las titulaciones que permiten otorgar estos certificados son las de ingeniero, ingeniero técnico, arquitecto y arquitecto técnico. 

Este es un mercado con mucha oferta, así que es conveniente comparar precios y elegir el más económico. En la web se puede encontrar con facilidad el contacto de muchos profesionales. Una vez elegido quién se va a hacer cargo de expedir nuestro certificado energético, se acordará una fecha de visita al inmueble.

Es esencial que el propio profesional visite la vivienda. Puedes encontrar alguno que te ofrezca el certificado sin realizar una visita presencial, pero no debes aceptarlo. Es obligatorio que el técnico acuda hasta el inmueble para que el documento tenga validez. 

El técnico calculará la eficiencia energética y la dará una calificación –desde la A la G– que deberá constar en la etiqueta energética. En esta tarjeta también aparece el consumo de energía anual y el consumo de CO2.

Tras el pago de los honorarios al profesional, se procederá a la entrega del certificado eficiencia energética. El técnico puede tomar fotos como datos adicionales para una mejor recopilación de información. Debemos facilitarle en todo momento el acceso a las diversas instalaciones para que el informe sea lo más preciso posible.

El profesional debe guiar al propietario en los pasos a seguir para registrar el certificado en el órgano correspondiente  de la comunidad autónoma donde nos encontremos -excepto en Cataluña, donde el registro lo realiza el mismo profesional-. 

En este órgano oficial comprobarán que los documentos son correctos y recibirás la etiqueta energética que prueba la eficiencia del inmueble para que puedas mostrarla a las personas interesadas en comprarlo o alquilarlo.

¿Cuánto cuesta?

En nuestro país no existe una tarifa fija para obtener el certificado energético. Cada técnico podrá establecer los precios que considere oportunos. No obstante, cabe señalar que lo que más influye a la hora de decidir el precio son la localización y el tamaño de la vivienda. Probablemente un técnico que trabaje a pocos kilómetros de una vivienda ofrezca un presupuesto mucho más económico.

Todo lo que ayude al técnico podrá ser recompensado con una rebaja del precio de sus servicios. Por ejemplo, facilitarle los planos de la vivienda o hablar previamente con el portero o el encargado del edificio si alguna de las instalaciones requeridas son comunitarias.  

Lo que más influye en el precio del Certificado son la localización y el tamaño de la vivienda

Los pisos son los inmuebles que resultan más baratos certificar. No existe una norma general, pero podemos estipular que el metro cuadrado cuesta aproximadamente 1,5 euros. Las viviendas familiares suelen ser más caras ya que son más grandes y cuentan con varias plantas. Respecto a los locales comerciales, serán más baratos aquellos que cuenten con espacios diáfanos y no tengan demasiados elementos como tabiques o instalaciones.

El seguro del hogar y el certificado energético

Algunas compañías ofrecen a sus clientes la opción de contratar un servicio adicional para brindar asesoramiento en la obtención del certificado energético. Las aseguradoras cuentan con una red de arquitectos e ingenieros que ponen a disposición los asegurados para facilitar esta tarea que puede resultar engorrosa. Si tienes un seguro de hogar contratado puedes consultar con la compañía si ofrece este tipo de servicio.

Alquileres y mascotas: ¿me cubre el seguro en caso de desperfectos?

¿Se hace cargo el seguro si tu mascota destroza el piso en el que vives de alquiler? Resolvemos estas y otras dudas

Mucha gente opta por el alquiler –especialmente los jóvenes– cuando no puede acceder a una hipoteca o cuando se ve obligado a mudarse con frecuencia. Es una alternativa poco rentable pero una solución óptima para una amplia mayoría. 

Por desgracia, alquilar tampoco es sencillo: dar con unos buenos caseros, que el piso esté en óptimas condiciones, que no haya cláusulas abusivas, que la fianza no sea excesiva, etcétera, son algunas cuestiones que entran en juego.

Los propietarios de mascotas deben añadir una preocupación a la lista: ¿qué hago con ella?, ¿puede venirse a vivir conmigo?, ¿qué ocurre en caso de desperfecto?, ¿lo cubre el seguro? Si estás en este punto, necesitas saber todo lo que te vamos a contar en esta guía.

Animales domésticos en piso de alquiler: ¿pueden vivir con nosotros?

En primer lugar nos centraremos en si nuestra mascota puede vivir con nosotros en un piso alquilado. Así, y según lo que se desprende del texto de la Ley 29/1994, de 24 de noviembre, de Arrendamientos Urbanos, es el propietario del piso (el arrendador) quien tiene la última palabra sobre el tema. Además, ha de dejar constancia de su postura en el contrato de arrendamiento:

Artículo 4, Régimen aplicable

“2. Respetando lo establecido en el apartado anterior”  (es decir, que prevalece la LAU en cuestiones generales), “los arrendamientos de vivienda se regirán por los pactos, cláusulas y condiciones determinados por la voluntad de las partes, en el marco de lo establecido en el título II de la presente ley y, supletoriamente, por lo dispuesto en el Código Civil.”

De modo que la residencia del animal en la vivienda es algo que se puede pactar añadiendo una cláusula de mascotas al contrato de alquiler. 

Pero el arrendador también está en su derecho de negártelo y de incluir una cláusula específica en el documento que lo refleje. También puede darse el caso de que se trate de un contrato estándar que no diga nada al respecto.

¿Y si el contrato no dice nada al respecto?

En todo caso, si tienes mascota, debes notificarlo y pedir permiso a los propietarios, para que no haya problemas legales. 

De lo contrario, si tu pequeño peludo causa molestias a la comunidad, te podrías ver en la calle: según la LAU (Ley de Arrendamientos Urbanos), el arrendador tiene derecho a dar por finalizado el contrato de alquiler en algunos supuestos, como en el caso de que “en la vivienda tengan lugar actividades molestas, insalubres, nocivas, peligrosas o ilícitas” (artículo 27).

No aclararlo desde el principio puede llevar a conflictos que acaben en un juzgado, con un arbitraje. Pero hay sentencias que han dado la razón a los propietarios, pese a que en el contrato no estaba prohibido explícitamente tener mascotas. 

Sin embargo, las molestias o los malos olores y otras circunstancias pueden ser alegadas para argumentar un incumplimiento del contrato y de las citadas leyes. El mejor consejo que podemos darte, visto lo visto, es que no lo escondas. Si no admiten mascotas, busca otro piso.

No aclararlo desde el principio puede llevar a conflictos que acaben en un juzgado, con un arbitraje. 

Si no admiten mascotas, busca otro piso

Asimismo, el Código Civil establece el derecho del propietario a desahuciar a su inquilino, según lo que dicta el artículo 1569, en el que comenta que podrá hacerlo si expira el término convencional o fijado de la duración del arrendamiento, si no paga, si infringe otras condiciones estipuladas en el contrato y si utiliza la casa para servicios u otros usos no pactados.

Tus obligaciones como inquilino y dueño de una mascota

Que esté permitido tener un animal en tu casa no significa que no haya otras normas que cumplir. Para empezar, estás obligado a reparar el daño causado. Si es de tu mascota, también. Lo dice el Código Civil, en el artículo 1563:

“El arrendatario es responsable del deterioro o pérdida que tuviere la cosa arrendada, a no ser que pruebe haberse ocasionado sin culpa suya”.

Si tu gato destroza las cortinas o tu perro hace cualquier estropicio en la casa, es tu obligación reparalo. Otra posibilidad es que no recuperes tu fianza entera, si no repones los objetos dañados o los reparas antes de abandonar la casa. Pero también puedes optar por contratar un seguro que cubra estas circunstancias.  

Si tienes un perro y es de una de las razas consideradas “potencialmente peligrosas” estás obligado, además, a contar con un seguro de responsabilidad civil como mínimo o un seguro de mascotas.

Seguros relacionados con mascotas

Hay varias opciones para proteger a tu mascota y al mismo tiempo proteger tus bienes o los del arrendador. Estas son las soluciones:

Que el propietario cuente con un seguro de hogar que cubra el continente: las paredes, las molduras, los suelos, la pintura… Todo aquello que se considere elemento constructivo y estructural en la casa. En este caso, los daños sobre estos elementos quedarían cubiertos.

Que el inquilino contrate un seguro de hogar para el contenido: así, los posibles daños sobre los objetos como el mobiliario también quedan cubiertos. Es interesante que esta póliza contemple también la garantía de responsabilidad civil. 

De esta forma los daños causados a terceros (por ejemplo, una gotera), cuando sean culpa tuya, también quedan cubiertos.

Que el inquilino cuente con un seguro de mascotas: además de disfrutar de asistencia sanitaria para ella, estará protegido en caso de que le exijan responsabilidad civil por los daños materiales o a terceros provocados por su mascota.

Que el arrendatario cuente con un seguro de inquilino que le permita contar con la cobertura de mascotas. 

También es recomendable porque ofrece garantías importantes como la recuperación de fianza o la defensa jurídica y cubre los gastos por daños (siempre en los límites pactados en la póliza).

¿Cómo se asegura una vivienda sostenible?

Una casa ecológica es aquella que minimiza el gasto energético y cuida el medio ambiente
Durante los últimos años hemos visto cómo la preocupación por el medio ambiente ha ido calando cada vez más en la sociedad. 

Un sentimiento ante el que particulares, gobiernos y empresas han decidido actuar. Nos estamos refiriendo a cuestiones como la aparición y popularización de los coches eléctricos, de electrodomésticos con emisiones de gases muy bajas, a la implantación de paneles solares y al desarrollo de otros sistemas que cuidan de nuestro planeta.

De hecho, incluso hemos adaptado estas tecnologías “ecofriendlys” a nuestro hogar en lo que se conoce como viviendas sostenibles, cada vez más frecuentes. Pero ¿sabes qué seguro de hogar necesitan estas casas? Te contamos todo lo que tienes que saber y cómo puedes encontrar los mejores opciones utilizando nuestro comparador online para estar cubierto ante cualquier percance.

¿Qué es una casa sostenible?

La arquitectura sostenible tiene en cuenta el medio ambiente cuando diseña nuevas construcciones. Valora que los materiales, la estructura y los procesos de fabricación no tengan un impacto negativo en el entorno natural. Su objetivo es que la naturaleza y el urbanismo convivan en armonía, fomentando la eficiencia energética y aprovechando al máximo los recursos naturales para que los sistemas funcionen.

Actualmente, la mayor parte de la energía que consumen las casas va a parar a los sistemas de calefacción y refrigeración. Los electrodomésticos también se llevan una parte importante, sobre todo aquellos que están permanentemente conectados a la corriente, como el frigorífico.

Estos factores, entre otros, han propiciado el auge de estas construcciones eficientes, cuyos diseños y funcionalidades son muy dispares entre sí y dan cabida a mucha creatividad e imaginación. La meta final es minimizar la huella que el ser humano y sus acciones dejan en la tierra.

Condiciones que hacen sostenible una casa

Las viviendas sostenibles tratan de garantizar la eficiencia mediante la combinación de fuentes de energía renovables para ahorrar todo lo posible, tanto en energía como en dinero. Hay ciertas características que hacen de una casa una vivienda del tipo que nos ocupa:

La ubicación

La orientación es uno de los factores más importantes ya que una correcta ubicación permite aprovechar al máximo la energía natural. Si la casa mira al sur, en invierno obtendremos más energía solar y su impacto se reducirá en los meses estivales. Es una buena forma de ahorrar en calefacción y aire acondicionado.

Estructura eficiente

Cuando vamos a construir o a reformar una casa, nos fijaremos en que tenga una estructura eficiente. Los diseños más minimalistas, como las viviendas modulares y compactas pueden regularse para adaptarse al entorno y conseguir modelos todavía más más ecológicos. Además, este tipo de diseños reducen el impacto visual en el entorno.

Materiales

Una casa nunca será del todo sostenible si sus materiales no lo son. Además, elegirlos correctamente nos permitirá ahorrar a largo plazo. Porque si bien inicialmente suelen ser más caros, acaban resultando rentables para el bolsillo y para la naturaleza con el tiempo.

La arquitectura sostenible tiene en cuenta al medio ambiente cuando diseña nuevas construcciones
Respeto por las zonas verdes

Integrar la vivienda en la naturaleza es una objetivo clave de un hogar bioclimático, un punto en el que deberemos dar prioridad a las zonas verdes. Una manera de respetar el medio ambiente pero también de disfrutar de ventajas como tener un jardín en la azotea, un pequeño huerto donde cultivar nuestras propias hortalizas y verduras o incluso instalar un jardín vertical que ayude a regular la temperatura.

Aislamiento y ventilación

Como hemos apuntado, un alto porcentaje de la energía se lo llevan los sistemas de calefacción y aire acondicionado, por lo que el correcto aislamiento de la casa será primordial. Una vivienda bien aislada es una vivienda más sostenible. Las construcciones deben tener en cuenta la instalación de las cubiertas del edificio para evitar los cambios bruscos de temperatura y mantener la temperatura idónea dentro del hogar.

Existen aislamientos naturales y siempre podremos instalar ventanas con doble vidrio, también muy útiles para atenuar el ruido del exterior, además de para evitar la aparición de humedades y filtraciones. Tener un buen sistema de ventilación también resulta recomendable.

Uso correcto del agua

Además de la luz, el recurso que más usamos en nuestra vivienda es el agua. Es un recurso básico para la vida y abusar de ella puede conllevar gastos adicionales en la factura a fin de mes. En una vivienda eficiente, el consumo del agua debe ser moderado. 

Por suerte, este tipo de construcciones suelen tener sistemas de almacenamiento que permiten reutilizar el agua de la lluvia, la lavadora y similares para actos tan cotidianos como rellenar la cisterna o regar el jardín.

Sistemas de bajo consumo y energías renovables

El funcionamiento general de la vivienda debe estar basado en las energías renovables y el ahorro energético, así que es recomendable optar por bombillas y electrodomésticos de bajo consumo y por aquellos que emitan el menor número de emisiones posibles. Apostar por los inteligentes, capaces de adaptarse a nuestro consumo, es otra alternativa muy interesante.

Por supuesto, podemos hacer que nuestra casa sea sostenible si la fuente de energía procede directamente del sol. Una práctica que todavía no está muy extendida en España y que requiere un importante desembolso inicial, pero que acaba resultando rentable. 

Así, son cada vez más las familias que se animan a instalar placas solares en su azotea o jardín. Estas pasan a ser su fuente principal de energía, aunque es recomendable no romper lazos con las grandes empresas proveedoras de electricidad, ya que en caso de fallo nos quedaremos sin energía.

Asegurar una vivienda ecológica

Precisamente debido a que no es muy común utilizar en casa este tipo de energías renovables, es difícil que encontremos una póliza que cubra los daños en placas solares. No obstante, algunas entidades ofrecen pólizas específicas para grandes huertos de placas solares con cobertura para caso de incendio, rotura, avería, defensa jurídica, responsabilidad civil y honorario de peritos.

Por lo general, sin embargo, el seguro funciona básicamente como en el resto de pólizas de hogar. Si encontramos una compañía que cubra las placas, entenderán que son una instalación más, como si se estropea nuestra caldera de agua caliente. Hay aseguradoras que cubren más daños que otras, aunque depende de lo que especifiquemos en nuestro seguro como contenido.

Seguros de hogar para zonas sujetas a terremotos o inundaciones

Tener una póliza que te proteja ante estas catástrofes naturales imprevisibles resulta fundamental
Si bien no es lo habitual en nuestro país, existen algunos territorios en los que las catástrofes naturales son frecuentes. 

Nos estamos refiriendo a las inundaciones, huracanes y otros desastres que pueden causar grandes perjuicios en los hogares y vidas de los afectados. Razón de más para contar con un seguro de hogar para nuestra vivienda que nos proteja. En este artículo, te contamos de qué manera estás cubierto con tu póliza y cómo actuar en estos casos.

A priori, eso sí, debes saber que las compañías aseguradoras atienden a la zona geográfica para realizar la tarificación de los seguros de hogar y que, en todo caso, los fenómenos catastróficos naturales son difíciles de prever. Sin embargo, estos riesgos poco comunes como los terremotos y las inundaciones pueden generarnos pérdidas incalculables como propietarios.

España y su riesgo en terremotos e inundaciones

En la actualidad, España no es una zona de alto riesgo en referencia a los terremotos aunque, los expertos aseguran que el sur de la península sí es sísmicamente más activo y peligroso. Todos tenemos en nuestra retina grabado el seísmo que ocurrió en 2011 en la localidad murciana de Lorca, que se convirtió en desastre.

No obstante, el Informe sobre Riesgo Mundial (World Risk Report 2016) elaborado por el Instituto de Medioambiente y Seguridad Humana de la Universidad de Naciones Unidas, que evalúa la situación de los países ante los desastres naturales, muestra datos favorables. Según indica, nuestro país tiene un riesgo muy bajo. En concreto, ocupamos la posición 143, de un total de 171, lo que significa que estamos  preparados.

Para acceder a esas indemnizaciones, el asegurado deberá encontrarse al corriente del pago de las primas de su seguro de hogar
Pero en el caso de las inundaciones, no podemos decir lo mismo ya que España es una península rodeada de agua prácticamente por todas partes. Lo lógico es que las zonas costeras e islas sean más propensas a anegarse. Además, nuestro territorio cuenta con innumerables ríos que hacen que algunas zonas del interior también corran riesgos.

Al respecto, la normativa europea advierte de que el riesgo de inundación y la escala de los daños se incrementarán en el futuro como consecuencia del cambio climático, la gestión deficiente de las cuencas y la construcción en zonas poco recomendables. De ahí que el Ministerio de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente asegure que las inundaciones son la catástrofe natural que mayores daños genera en España, cuantificados en 800 millones de euros al año, según el Consorcio de Compensación de Seguros y el Instituto Geológico y Minero. Se trata, además, de sucesos que ponen en riesgo vidas humanas y que suponen pérdidas cuantiosas en viviendas.  

Los seguros de hogar y los terremotos

Debemos subrayar que los seguros de hogar habituales no contemplan de forma explícita la cobertura en caso de terremoto. Pero esto no supone que el asegurado no esté protegido en esta circunstancia sino que el que asume la responsabilidad es el Consorcio de Compensación de Seguros.

Concretamente, esta entidad pública (adscrita al Ministerio de Economía y Hacienda) está al servicio del sector asegurador y actúa con carácter subsidiario para dar cobertura a los asegurados en casos de riesgos extraordinarios no cubiertos por las compañías. Para acceder a esas indemnizaciones, el asegurado deberá encontrarse al corriente del pago de las primas de su seguro de hogar.

De manera habitual, las pólizas de hogar indican qué son ‘riesgos extraordinarios’ cubiertos por el Consorcio:

Fenómenos de la naturaleza: inundaciones extraordinarias, terremotos, maremotos, erupciones volcánicas, tempestad ciclónica atípica y caídas de cuerpos siderales y aerolitos.

Cabe destacar que en la tempestad ciclónica atípica quedan incluidos, entre otros, los tornados y los vientos extraordinarios (rachas superiores a los 120 Km/h).

Los ocasionados violentamente como consecuencia de terrorismo, rebelión, sedición, motín y tumulto popular.

Hechos o actuaciones de las Fuerzas Armadas o de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en tiempo de paz.

No obstante, hay exclusiones a la cobertura del Consorcio. De este modo no se asumirán los daños derivados de:
  • Granizo, peso de la nieve y vientos no extraordinarios (inferiores a 120 kilómetros por hora).
  • Elevación del nivel freático, movimiento de laderas, deslizamiento o asentamiento de terrenos, desprendimiento de rocas y fenómenos similares, excepto que éstos fueran ocasionados por la acción de la lluvia que, a su vez, hubiera provocado en la zona una situación de inundación extraordinaria.
  • Conflictos armados.
  • Actuaciones tumultuarias en el curso de manifestaciones y huelgas convocadas conforme a la legislación vigente.
  • En una instalación nuclear, salvo cuando los daños fueran consecuencia de un acontecimiento extraordinario.
  • Los que sean consecuencia de vicio o defecto del bien en cuestión o por mero transcurso del tiempo.
  • Eventos que, por su magnitud y gravedad, sean calificados por el Gobierno español como “catástrofe o calamidad nacional”.
  • En efecto, disponer de un seguro de hogar en zonas de terremoto nos puede socorrer y facilitarnos, con las indemnizaciones, retomar nuestras vidas en caso de que hayamos perdido todas nuestras pertenencias materiales.
Las inundaciones y el seguro del hogar

Como ya hemos mencionado anteriormente, el riesgo que más daños produce en España es el de inundación, y, a efectos de cobertura, se entiende por tal el anegamiento del terreno producido por lluvias o deshielo; por aguas procedentes de lagos con salida natural, ríos, o de cursos naturales de agua en superficie cuando se desborden de sus cauces normales; y  el embate del mar en la costa, aunque no haya anegamiento.

Sin embargo, no quedan comprendidos bajo este concepto de inundación la lluvia caída directamente sobre el riesgo asegurado, o la recogida por su cubierta o azotea, su red de desagüe o sus patios, como tampoco la inundación ocasionada por rotura de presas, canales, alcantarillas, colectores y otros cauces subterráneos artificiales, salvo que la rotura se haya producido como consecuencia directa de evento extraordinario cubierto por el Consorcio.

Al respecto, el Ministerio de Agricultura destaca una serie de datos, a modo de ejemplo. Tan solo en bienes asegurados, en el período 1971-2012 (basadas en estadísticas del Consorcio), el 42,9% de los expedientes tramitados habían sido debidos a daños por inundaciones, que supusieron el 60,3% del total de las indemnizaciones, las cuales, de media, fueron más de 130 millones de euros cada año.

Tras una catástrofe, cómo debes actuar

Después de una catástrofe intentaremos acceder a nuestro domicilio cuando los técnicos nos lo indiquen. Lo primero será escribir un listado lo más exacto posible de las pérdidas materiales sufridas y solicitar siempre factura de todos los gastos que se hayan tenido durante esos días en los que no se hayamos podido entrar a la vivienda.

También deberemos comunicarnos con nuestra compañía de seguros para conocer el plan de actuación. Algunas aseguradoras pueden tramitar los documentos si disponen de una copia del contrato porque es posible que los nuestros se pierdan en el percance. Además, nos pueden poner en contacto directamente con el Consorcio para facilitar el proceso de reclamación de daños.

En resumen

Ante una catástrofe natural los asegurados tienen acceso a ayudas auspiciadas por el Consorcio. Si no se dispone de póliza, la única posibilidad es esperar a que se indique el área como zona catastrófica. Por ello, es fundamental disponer de un seguro del hogar que nos asista ante todo tipo de acontecimientos. 




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